Hasta un 80 por ciento, bajaron las ventas de los vecinos del barrio de “El Dique”, quienes en el marco de las fiestas a la Virgen de Guadalupe, vendían alimentos para los peregrinos.
Lourdes es una de las vecinas de la zona que año con año abría las puertas de su casa para ofrecer el tradicional “pan de fiesta”.
Sin embargo, la pandemia generada por el covid-19 generó que se prohibieran las peregrinaciones en honor a la virgen, por lo que su venta cayó en un 80 por ciento.
“No hay venta, la verdad no hay porque no vino casi gente. Además, los están sacando por otra calle y cuando se van ya no pasan a comprar su pan, así nos afectó el covid”, expresó.
Mencionó que el día “fuerte” con mas venta era el 12 de diciembre, sin embargo, días antes y después también había afluencia que adquiría su pan.
Ahora, dijo, “no he vendido casi nada”, lo que empeora la crisis económica que enfrentan.
Dicha situación afectó a panaderos, vendedores de tamales, atoles, café y tienditas de la esquina, quienes aprovechaban las festividades para ahorrar recursos la navidad.
Pero además, afectó también a quienes cada año acudían a tomar fotografías, vender ropa, cobertores, dulces y demás productos de feria.