La conmemoración del domingo de ramos es para la comunidad católica la celebración de la gloria de Jesucristo a su arribo a Jerusalén, pero también un recordatorio del dolor y la pasión del hijo de Dios, así lo afirmó el Arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios.
Durante su mensaje, en la ceremonia de bendición de los ramos, celebrada este domingo en la Catedral de Xalapa, Reyes Larios recordó que Jesús cumplió con la misión de su padre sin quejarse, por lo cual invitó a la feligresía a seguir su ejemplo y cargar la cruz que a cada quien le toca en su vida diaria.
“Empieza con una entrada triunfal y se vuelve sobria y dolorosa con las lecturas de la liturgia que presentan el drama de la pasión y la cruz; todos nosotros estamos invitados a seguir el ejemplo de la pasión de Jesús, a cargar la cruz todos los días en nuestras propias vidas, al sufrimiento que nos viene por distintas causas, integrarlo al proceso de salvación”, indicó.
Asimismo, recordó que Cristo a pesar de ser el hijo de Dios y tener la posibilidad de salvar su vida, aceptó su muerte en la cruz para salvar a la humanidad de los pecados y siguiendo los designios de Dios.
Por lo anterior, el Arzobispo dijo que Jesús mostró la humildad que la comunidad católica debe manifestar día a día en su actuar y apegarse a sus enseñanzas.
Finalmente, pidió que, durante la Semana Santa, la oración y la reflexión sea un instrumento para acercarse a Dios y con ello poder vivir acorde a su ejemplo.