Para la investigadora especialista en temas tributarios de la Universidad Veracruzana, Yovana Celaya Nández, el incremento de los impuestos evidencia cada vez más el desequilibrio entre lo que se paga y la retribución de bienes y servicios provenientes del Estado.
Por lo que dijo que cada vez es más urgente el empoderamiento ciudadano, solo así se reducirá la impunidad e ineficacia del Estado.
Según un reporte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, entre 2014 y 2015, México tuvo el mayor aumento en la relación entre impuestos y el Producto Interno Bruto, impulsado, sobre todo, por el impuesto especial sobre producción y servicios que registró el mayor incremento en su recaudación, gracias a lo obtenido por el consumo de gasolina y diésel.
También se registraron aumentos en los ingresos del impuesto corporativo y los impuestos personales, reflejando el impacto de la reforma tributaria de 2014, y con el diseño del sistema tributario se logró un crecimiento económico para el ingreso del Estado, pero no hay reflejo impactante de beneficio social.
Por lo que la investigadora considera que las políticas tributarias no han significado un aumento a los ingresos para apoyar las inversiones públicas y los programas que ayudarán a fomentar el crecimiento y la inclusión social.