Del 2010 a la fecha sigue la disputa entre asociaciones civiles ambientalistas y la empresa de origen canadiense Candelaria Mining Corp, por la extracción de oro en la mina Caballo Blanco ubicada a 70 kilómetros del Puerto de Veracruz y a 30 kilómetros en line recta de Xalapa en el municipio de Alto Lucero.
El presidente de la Asociación Civil Somos la Semilla del Cambio Juan Carlos Atzín Calderón, manifestó que el problema por el cual se ha pugnado desde hace varios años para que no se haga una extracción del mineral es por el impacto brutal al medio ambiente y a la salud de los pobladores de la región y sus alrededores.
“A todas luces está generando un impacto ambiental negativo para esta zona y para todo el estado de Veracruz, todos los gases que se desprendan, todas las corrientes de aire podrían arrastrar todos estos elementos hacia otras zonas de la entidad y contaminarían los ríos, el suelo, la flora, la fauna y la salud de los ciudadanos que habitan a los alrededores del lugar”.
En entrevista en el estudio de sinmuros.com.mx, señaló que existe un asunto político y de corrupción, pues de acuerdo al expediente que tienen los permisos por parte de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), se dieron al inicio de la administración de Enrique Peña Nieto ya siendo gobernador Javier Duarte de Ochoa.
“Lo cual nos causa ruido que, en 2012, fue la elección presidencial al entrar el nuevo gobierno encabezado por Enrique Peña Nieto que ha desencadenado las reformas estructurales. No dudo de que haya intereses económicos y políticos gubernamentales desde las grandes esferas del gobierno federal”.
Indicó que no existe un registro de licitaciones, aunado a ello, la empresa tampoco ha cumplido con las normas nacionales y ha tratado de buscar las formas para poder iniciar los trabajos de extracción.
“El tema es en las grandes esferas, gubernamentales, esto ha desencadenado una serie de proyectos en todo el país, no solo en temas de mineros, sino en temas de extracción de gas natural y de algunas otras cuestiones. Lo que ha sucedido es que, con las inversiones extranjeras, la empresa ya está operando en varias partes de la república, pero no se sabe cuándo se hizo la licitación”.
El activista ambientalista aseguró que seguirán en la lucha por salvar el patrimonio natural de Veracruz, en especial por la mina de oro Caballo Blanco, la cual consideran es una riqueza que los extranjeros no deben llevarse.