“Hoy en Xalapa no despedimos a Acela, Acela permanecerá siempre en anales históricos de Veracruz”, así lo señaló, el gobernador del Estado, Miguel Ángel Yunes, tras rendir guardia de honor al féretro de la líder moral del Sindicato Estatal de Trabajadores al Servicio de la Educación (SETSE), Acela Servín Murrieta.

Con un mensaje durante el homenaje realizado en las instalaciones del SETSE, el mandatario estatal, recordó que, al inicio de su carrera política conoció a la líder, quien para ese tiempo ya era un personaje dentro de la vida sindical y pública de la entidad, con quien pese a las diferencias ideológicas y partidistas compartió varios años de amistad.

“Y tuve la oportunidad de disfrutar de su amistad, de su afecto durante toda la vida a partir de que nos conocimos; durante mucho tiempo la acompañé y cuando la distancia se presentó en los colores políticos la amistad se acrecentó más, fuimos más cercanos, más amigos, nunca nos separan los temas partidistas como no deben separar a nadie”, declaró.

Igualmente, reseñó que la docente durante toda su carrera como diputada local, federal y Senadora, marcaron un precedente en la historia de Veracruz.

Hizo hincapié, que incluso, cuando él tomó protesta como gobernador del Estado, sostuvo un encuentro con la líder sindical quien le solicitó atender los problemas financieros del Instituto de Pensiones del Estado (IPE), presentados durante gobiernos estatales anteriores.

“La expresión de Acela, la única la más sentida, la más clara, fue: ‘gobernador le encargo al IPE. El IPE está muy mal y tenemos que resolver la situación del instituto le encargo a los jubilados y pensionados quienes han vivido en la zozobra de no poder cobrar (…) no me hablo de nada personal, ni nada que no fuera la relación institucional en beneficio de maestras y maestros”, apuntó.

Yunes Linares, insistió que la participación de la también consejera del IPE, fue excepcional dentro de la vida sindical, toda vez, que dio vida junto a otros maestros a una de las organizaciones sindicales más fuertes y que fue construida en una de las etapas difíciles del Estado, donde formar un sindicato independiente y democrático no era fácil.

“Ella tuvo el valor de hacerlo (…) ella vivía para el SETSE, para los maestros y maestras y la recordare siempre como lo que fue alegre y sensible, pero también como una mujer sobria, como una mujer que vestía con seriedad y pulcritud; lamentó mucho lo sucedido”.