Rociando alcohol, Gregorio Santiago forma un círculo en el piso, alrededor de la persona a la que hará una limpia. Toma un ramo de hierbas de olor y le enciende fuego a las hojas secas para frotarlo sobre el cuerpo de la persona, en este caso una mujer, a la vista de curiosos y familiares.
Cada primer viernes de marzo, decenas de personas acuden al mercado “Hermenegildo Galeana”, en el centro de Xalapa para despojarse de las malas vibras y atraer energía positiva.
“Es un ritual, se representan los cuatro elementos: el aire, el fuego, el agua y la tierra. Las plumas representan el aire, las maracas el sonido, precisamente de los antepasados. Son purificaciones de cuerpo, alma y espíritu”.
Después toma el copal e inciensa a las personas que permanecen ahora con los brazos extendidos en forma de cruz. Al final se sacuden “todo lo negativo” y meten las manos en una bandeja con agua y cuarzos para finalmente sacudirse todo lo malo y hacer sonar una campana.
Gregorio Ocupa hierbas de olor para purificar todo lo negativo y símbolos de las siete potencias africanas, relacionados con la santería, colocados sobre un pequeño altar improvisado al final de un pasillo. “Se hace con lociones y los cuarzos que tiene adentro que son para limpiar el aura. Ya por último se ocupa la campanita para sacar todo lo negativo”.
“Son limpias de purificación y sanación, precisamente contrarrestan todo lo que dicen de la brujería, de lo negro”, explica al final de esta limpia. “Hoy que es luna llena, aprovecha uno toda la energía positiva”.
Ni brujería ni cosas del diablo
En el mercado Jáuregui ubicado a pocos metros del Galeana, las vendedoras de hierbas esperan a que den las 2 de la tarde para que empiecen a llegar sus clientes a hacerse una “limpia”. En los pasillos casi vacíos hay sábilas adornadas, amuletos e imágenes de santos, incluida la Santa Muerte.
Lamentan que la iglesia, especialmente en la católica los sacerdotes dicen a sus feligreses que eviten la compra de sábilas porque se relacionan con el diablo.
“No hay mucha, nos ha afectado un poquito lo de las iglesias, que no nos permiten que compren la sábila. Les dicen que no las compren porque son del demonio, las supersticiones y todo eso”, explicó la señora Rosario Chacón, quien con su familia vende hierbas y amuletos dentro de ese mercado.
Todos, tanto quienes hacen limpias y venden amuletos y hierbas aseguran que distan de lo que las religiones enfatizan al relacionarlo con el demonio.
“La gente lo mal ve porque piensan que el primer viernes de marzo es de brujería negra, están equivocados. Creen que es matar un animal, hacer un ritual, usar sangre… sí se hace, pero hay lugares específicos y para ciertas cosas. Nosotros aquí lo hacemos como protección y buena suerte”, explicó Patricia Angiano.
Un día “mágico”
“Es un día mágico, especial para quitarnos todas las malas vibras, todos los rencores, corajes que tenemos y hacerla energía positiva, hacer algo bueno. Darnos nosotros mismos. Vivimos en una era de muchos malos, de muchos corajes, de muchos rencores. Nosotros lo que hacemos sólo es preparar sábilas, ajos, herraduras, amuletos para quitar todo eso negativo para que sólo haya algo positivo” cuenta Patricia Angiano Sandoval, quien lleva 40 años vendiendo hierbas y amuletos.
“El día de hoy es para quitar todo lo malo. Todo lo que venimos arrastrando todo el año, es el día para quitar todo eso. Para que el ambiente de nuestra casa, de nuestro automóvil sea positivo, para irradiar energía positiva”.
Recargan de energía a la Santa Muerte
En los locales de productos esotéricos es común que la imagen de la Santa Muerte luzca vestida de blanco. Sus creyentes aseguran que en esta fecha “la niña blanca” se llena también de energía.
“En los tiempos que nosotros la ocupamos, es para que también ella reciba la energía que emana el universo. La vestimos de blanco”, explicó Guadalupe Chacón, locataria del mercado Jáuregui.
Refiere que el sincretismo es característico en la playa de Chalchihuecan donde se le hace un ritual en la playa en la que en esta fecha acuden personas a observar la lluvia de estrellas.
“Normalmente la ocupan mucho para abajo, lo que es en Catemaco, San Andrés, en las limpias de la lluvia de estrellas en Chalchihuecan, para que reciba la energía que es para ella”.
Le hacen el ritual, ella es Yemayá, advocación de la “patrona de la Bahía” adorada en Cuba, cuenta.
Día de Xochipilli, príncipe azteca de las flores; la tradición mexica se desvirtuó
“El primer viernes de marzo no es un comercio, es prehispánico, de la cultura mexica. Hoy es el día de las fiestas de las flores que se le dedicaba al Dios Xochipilli, príncipe de las flores” precisa Irma Hernández, quien atiende su local de herbolaria dentro del mercado.
Reprochó que esta fecha se haya vuelto comercial, en la que se adornan sábilas con amuletos, pues asegura que de acuerdo a los ancestros prehispánicos, se relaciona con el culto a las flores, previo a la primavera.
“Es un ramo de plantas, el ramo de las plantas que se colecta el primer (de marzo) a las 12 de la noche y termina a las cero horas del primer viernes de marzo”.
Explicó que la sábila es una planta traída por los franciscanos que acompañaron a los españoles y que utilizaron para la curación, y que como otros elementos que se fusionaron dando un aspecto de sincretismo, se incluyó en el uso de las flores en esta fecha.
“Ese ramo era tan famoso que no faltaba en ningún lugar. Lo colectaban y se ponía en alcohol. Sin azares, hinojos, mentas, para hacer infusión. Hoy también se preparan medicamentos que se ponen en alcoholes”.
Sin embargo, esta fecha con sentido en la cultura mexica hoy poco se toma en cuenta con este significado.
Así, el primer viernes de marzo, fecha en la que coincide con la Cuaresma sigue adoptando más elementos que muestran que el sincretismo sigue característico en nuestro país, mezclando elementos y creencias, asociados en su mayoría con el manejo de energía para alejar lo “negativo” y atraer lo “positivo” en un nuevo ciclo.