Un grupo de policías municipales se inconformaron a las afueras de su cuartel sobre la avenida Transísmica en Coatzacoalcos.
Ocho elementos dieron a conocer que sus compañeros no cuentan con certificación, además, que hay mujeres víctimas de acoso y que otros fueron despedidos de forma injustificada.
El secretario de gobernación, Alberto Mijangos salió a entablar diálogo con los 8 protestantes y tras convencerlos se los llevó a su oficina para poder llegar a acuerdos.
De inmediato los uniformados que permanecían al interior salieron a trabajar y negaron que las acusaciones de sus compañeros sobre presuntas irregularidades, acosos o despidos injustificados sean reales.
Por su parte, los quejosos aseguraron que ya interpusieron denuncias ante la Fiscalía regional y la Comisión Estatal de Derechos Humanos, pero no mostraron los documentos.