Astrónomos mexicanos estimaron que en octubre de 2023 en la península de Yucatán se verá el anillo de fuego que aparece durante los eclipses lunares, además, el 8 de abril de 2024 ocurrida un eclipse total de Sol.
El doctor Raúl Mújica, astrónomo del Instituto Nacional de Astrofísica, Óptica y electrónica (Inaoe), explicó que desde hace 8 meses, se creó en la República un Comité Nacional que se encargará de preparar al país para los dos grandes eventos que llegarán a México, según el periódico Infobae.
"Vamos a tener esta fortuna de que hay dos eclipses seguidos, están muy cercanos y van a pasar por territorio mexicano".
Según el astrónomo, el 14 de octubre de 2023, el primer eclipse será anular, es decir, la luna se colocará entre la Tierra y el Sol y al hacerlo, tapará la estrella. como no será cubierta por completo, en el cielo se verá una circunferencia dorada perfecta, también conocida como "anillo de fuego". Esta se forma por la parte de la estrella que queda sin cubrir.
“No se va a cubrir completamente el Sol, pero se va a formar esto que llaman ‘el anillo de fuego’”, explicó el astrónomo mexicano, quien recordó que esa denominación no es científica. “Va a ser cerca del mediodía. Va a pasar por la Península de Yucatán. Por un pedazo de Yucatán, un pedazo de Campeche y un pedazo de Quintana Roo”, agregó.
Mientras, la NASA señaló que el evento durará cinco minutos y 17 segundos y durante ese tiempo, el eclipse recorrerá sitios arqueológicos muy famosos de la península de Yucatán. “Va a pasar por zonas espectaculares, por ejemplo, por un pedazo de la reserva de Calakmul".
"Creo que mucha gente va a estar interesada en darse una vuelta por allá. Pero ahí va a ser solamente anular, no total, y va a servir para prepararnos para muchas cosas, en particular para el 8 de abril de 2024″, indicó el doctor.
Ya que en esa fecha, México tendrá el privilegio de ser el espectador principal de un eclipse total de Sol, pero sólo se podrá ver en estados del norte del país, "va a pasar por sitios como Sinaloa, Durango, Coahuila. En las ciudades más pobladas, como Mazatlán, Durango, Torreón, Monclova, Piedras Negras... Va a ser muy visto"
El doctor Mújica resaltó que las condiciones en esos lugares, en esa época del año, son muy buenas. En el norte de México "la posibilidad de que ese día esté despejado va a ser muy alta", añadió.
El 8 de abril de 2024 se repetirá la secuencia: la Luna pasará entre nuestro planeta y el Sol, solo que esta vez, el disco del satélite sí cubrirá por completo la estrella. Entonces, la sombra de la Luna se proyectará sobre algunas regiones del planeta, entre ellas, el norte de México. En los estados afectados, se hará de noche en pleno día.
“En esa franja el máximo es un poquito más de cuatro minutos, en el punto cuando se da la máxima duración de la totalidad. Entonces, durante cuatro minutos se va a hacer de noche. Va a ser un eclipse total grande, grandotote, muy espectacular. Yo se los recomiendo. Estos son eventos de una vez en la vida dicen".
El astrónomo recordó que para él sería el segundo porque le tocó el de 1991. "Por supuesto, mucha gente se va a desplazar para verlo, no solo desde otras partes de México, sino desde todo el mundo”, apuntó Raúl Mújica.
El eclipse total de Sol de 2024 va a durar cuatro minutos y 28 segundos, será visible también desde Estados Unidos y Canadá, según la NASA. Aunque el norte de México se llevará la mejor parte, mientras que el el resto del país podrá contemplarse un eclipse parcial y, por eso, es importante que toda la República se prepare para ese día.
“En todo México va a haber eclipse parcial. Entonces, el Comité tiene que pensar en todo eso. No solamente en estas zonas por las que pasan los máximos, sino en todo el país. Necesitamos trabajar principalmente con los estudiantes y las escuelas y también, con el público en general”, agregó.
“Está toda la noche de las estrellas, en conjunto”, indicó Mújica.
Los encargados de publicar toda la información relativa sobre los dos grandes eventos será el grupo que está conformado por los principales organismos astronómicos y planetarios del país, del Instituto de Astronomía de la UNAM.
“Se está haciendo todo el trabajo para que el público en general pueda observarlos y disfrutarlos, pero siguiendo todas las medidas de seguridad. Ya nos ha pasado también en eclipses que algunos recomiendan no verlos para que no se vayan a dañar. Nosotros no queremos eso. Lo que queremos es que la gente lo observe, lo disfrute, pero con toda seguridad. Ese sería como el objetivo principal”.
Lo cierto es que los espectadores mexicanos deben sentirse privilegiados porque en poco tiempo tendrán la oportunidad de contemplar dos eventos astronómicos, muy difíciles de observar. ¿Cuántas veces alguien puede decir que vio un eclipse total de Sol y otro anular, en menos de un año? Muy pocas. Y una de esas oportunidades extraordinarias nos la regalará el cielo mexicano.