Elsa Marisol Martínez Prieto, esposa de José Antonio Yépez Ortiz El Marro se convirtió en la maestra financiera que permitió pagar a sicarios, base social y funcionarios que ayudaban en la operación del cártel de Santa Rosa de Lima; además, tejió una red de empresas fachada y operadores financieros para lavar el dinero obtenido por los ilícitos de su esposo.
Para la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Yépez Ortiz es un fantasma en el sistema financiero formal: nunca ha tenido una cuenta bancaria pero ha movido tan solo en el último año 600 millones de pesos a través de su familia, con su esposa Marisol a la cabeza.
Es ella quien está detrás de distintas operaciones financieras con las que el CSRL buscó legalizar sus ganancias a través de distintas compañías, de giros de transporte.
Luego de la detención de El Marro, poco a poco emergen más elementos sobre cómo funcionó, por años, uno de los imperios criminales más poderosos del Bajío.
Mientras Yépez movía sicarios, ordenaba asesinatos, secuestraba, robaba mercancía y perforaba ductos con ganancias de hasta 30 millones de pesos al día, su esposa recibía embarques de efectivo, administraba el dinero, lo distribuía en pagos de nómina, contrataba prestanombres y constituía un pequeño imperio de empresas cascarón.
Con la aprehensión de El Marro, Marisol se perfilaría como el personaje de mayor poder que le queda al cártel de Santa Rosa de Lima pues de acuerdo a las investigaciones de la UIF, es el cerebro que, gracias a su capacidad financiera, permitió que este grupo delictivo creciera exponencialmente.
En apenas media década, Marisol logró estructurar una compleja red de operadores financieros que incluye desde su cuñada Karen Lizbeth Yépez Ortiz hasta la novia de su esposo Karina Mora Villalobos y a la mamá de ésta, Doria Villalobos Cabal. Pese a las grandes sumas de capital a su disposición, Martínez Prieto operó por varios años fuera del radar oficial.
Cometió solo dos errores -detectados por el sistema financiero- que le permitieron a la UIF poner a la esposa de El Marro en el mapa. Recibió 404 mil 500 pesos en depósitos en efectivo entre el 2017 y el 2018, y compró al contado un auto por 280 mil pesos en mayo de 2018.
Pero si en el uso del dinero fue precavida, en su faceta como empresaria -y creadora de empresas cascarón-, fue más osada. Constituyó a través de prestanombres las compañías Lonate Transportes S.A. de C.V. y Agencia Logística de Celaya, dedicada al giro de “transporte de mercancías” y “transporte de cargas especiales”.
En cuanto a Lonate Transportes, entró en operaciones en 2017 bajo el giro de carga de transporte foráneo y ha enviado a Marisol por concepto de facturación 10 millones de pesos desde su creación. Para hacerla crecer, incluso compró tractocamiones por 2.05 millones de pesos el 23 de enero de 2019 en Mexicali y cajas de tráiler por 876 mil dólares a una compañía de Estados Unidos y por 1.2 millones de pesos a otra compañía nacional.
La UIF detectó que esta compañía era usada para lavar dinero pues transfiere grandes cantidades de dinero a personas que no son consideradas relevantes en el sistema financiero pues no realizan comúnmente fuertes movimientos.
Por ejemplo, Lonate Transportes le transfirió 7.98 millones de pesos a Gabriela López Belman, familiar lejano de El Marro. También depositó 2.2 millones de pesos a Doria Villalobos Cabal, identificada como la madre de la novia del líder criminal. Un tercer prestanombre, es Jorge Flores a quien la compañía le transfirió 2.04 millones de pesos.
Esta empresa además, recibió depósitos en efectivo por 6.54 millones de pesos.
La segunda empresa que Marisol opera es la Agencia de Logística Celaya, que facturó a la esposa de El Marro 6.37 millones de pesos de 2016 a 2017 y a la misma Gabriela López Belman 4.2 millones de pesos.
Dentro de la red de operadores financieros que maneja Marisol, está Karina Mora Villalobos, identificada como la novia del líder huachicolero, a quien aprehendieron en enero de este año y fue liberada por irregularidades al momento de su detención. Karina recibió depósitos en efectivo por 400 mil pesos en 2018, transfirió mil dólares a una clínica de cirugías estéticas en Colombia y fue quien compró por cuatro millones de pesos la casa donde vivía con El Marro en el exclusivo fraccionamiento Álamo Country Club en Celaya, Guanajuato. La hermana del Marro, Karen Lizbeth Yépez Ortiz, es otra de las operadoras financieras y retiró en efectivo 1.2 millones de pesos entre 2017 y 2018, hizo transferencias por 20 mil dólares a Estados Unidos y envió vía SPEI 150 mil pesos a Promotora Ganadera Campestre SPR de RL de CV, propiedad del sobrino del ex gobernador de Chihuahua, César Duarte.
En cuanto al resto de la familia del Marro, el sistema financiero no detectó movimientos de su padre Rodolfo Yépez; mientras que su madre, María Eva Ortiz, compró una camioneta de lujo Toyota modelo 2018 por 725 mil 900 pesos; giró cheques por 486 mil 810 pesos entre 2015 y 2016 a nombre de Agropecuaria Perla del Bajío y aparece como accionista de Pecuaria de la Isla, constituida en 2017.
Todos los movimientos de la familia de El Marro llevan a Marisol, de quien se desconoce su paradero pero que sigue operando las finanzas del cártel de Santa Rosa de Lima y los pocos recursos que le quedan. Mientras, pesa en su contra una denuncia que la Unidad de Inteligencia Financiera interpuso por lavado de dinero en febrero de 2019 ante la Fiscalía General de la República.
En esta misma denuncia, la UIF incluyó a la mamá, la hermana, el hermano y la novia del líder huachicolero por formar parte de esta red.