El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación determinó revocar la convocatoria para la elección de la dirigencia de Morena derivado de que el padrón de militantes con el que pretenden llevar a cabo su proceso interno no resulta confiable.
Tras adoptar la decisión por unanimidad y sin mayor discusión, el magistrado presidente Felipe Fuentes Barrera decretó un receso derivado de la interrupción de los militantes de Morena que calificaron de vergonzosa de resolución y acusaron al órgano jurisdiccional de haber violentado la autonomía y el derecho del partido a renovar su dirigencia.
No obstante en magistrado Indalfer Infante consideró en su proyecto que el derecho de auto organización y determinación de los partidos no tiene un carácter ilimitado, y evidenció que el partido ha incumplido su propia norma interna en el desarrollo del proceso interno.
De acuerdo con el proyecto, los estatutos de Morena únicamente prevén una suspensión en el proceso de afiliación 30 días antes de que se realicen los congresos distritales; por lo que carecen de elementos para decretar un corte al padrón militantes que puedan participar en el proceso electivo.
Por lo que revocó la decisión de que únicamente podrían participar en la renovación de la dirigencia quienes se hayan afiliado hasta antes del registrado antes del 20 de noviembre de 2017 y que excluía a una importante de militantes.
A decir del magistrado Infante, Morena tampoco ha llevado a cabo las acciones de depuración y actualización del instrumento registral que ellos mismos se impusieron con la finalidad de garantizar que todos los actores del cambio verdadero puedan participar en el proceso de la renovación de su dirigencia.
Por otra parte, los magistrados revocaron la resolución de la Comisión de Honor y Justicia del partido que abrió la puerta a que los miembros de la actual dirigencia de Morena pudieran reelegirse para este proceso interno.
Ello, ya que consideró que la designación de la dirigencia en 2012 no fue electa bajo los estatutos del partido, sino que fue una dirigencia transicional del paso de asociación civil a partido político; por lo que no puede estar sujetas a las reglas de reelección previstas en los estatutos.