Tras considerar que las manifestaciones contra el metrobús en La Laguna fueron “auténticas”, esto durante su última gira en Durango, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, justificó la cancelación (a mano alzada) de la obra que había solicitado el gobernador, argumentando que el agua es más necesaria, además de que no se van a hacer obras “impuestas”.
Y agregó: “resulta que eso lo vinculan con corrupción, quien sabe por qué, pero lo rechazan, no dejo de considerar que hay concesionarios de transporte público que tampoco les conviene lo del metrobús, todo esto interviene”.
La mañana de este miércoles, un periodista le cuestionó cómo es que una consulta a mano alzada puede ser una muestra representativa, a lo que el mandatario arremetió contestando que, incluso, se podría hacer una consulta, eso sí, “no organizada por el INE, porque va a costar más que el metrobús”.
Reiteró que previo al evento, él llevaba ya el presupuesto asignado para dicha obra, pero al llegar y ver que el rechazo era generalizado optó por echarlo para atrás.
“En el evento yo llevaba ya la autorización de inversión para el metrobús, su continuidad a Gómez Palacios, lo llevaba como noticia, entre otras cosas, y desde que me bajo de la camioneta comienzan las manifestaciones, no al metrobús de manera generalizada, y se sometió a votación en la asamblea, se cuestiona mucho esto, pero cómo vamos a llevar a cabo una obra que no quiere la gente, cómo vamos a imponer”, concluyó.