Durante el tercer trimestre de 2017 se reportaron 510 eventos de robo a tren en todo el país, 7.6 veces más respecto de lo registrado en el primer trimestre del año, informó la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF).
Las entidades donde se concentraron los incidentes, añadió el organismo, fueron Puebla, Veracruz y Guanajuato.
En su reporte correspondiente al tercer periodo del año, señaló que en Puebla los robos crecieron exponencialmente, dado que al arrancar el año se reportaron tres casos, mientras que en este último la suma llegó a 533, es decir, un alza de 3 mil 533 por ciento.
En tanto, en Veracruz los atracos se dispararon 2 mil 175 por ciento al pasar de cuatro (primer trimestre) a 91 (tercer trimestre).
“Es importante dimensionar el repunte de este fenómeno en Puebla y Veracruz, donde se pasó de promediar un evento de robo al mes a uno al día”, señala el reporte de la agencia que encabeza Benjamín Alemán Castilla.
Guanajuato es la tercera entidad con mayor número de robos a ferrocarril, en el tercer trimestre del año reportó 67 casos, un alza de 272 por ciento respecto al primer trimestre. Le siguen Tlaxcala con 35 eventos y Sinaloa con 26 casos, entidades que también presentan incrementos considerables.
Recientemente, Lourdes Aranda, directora de Relaciones Gubernamentales de Ferromex y Ferrosur, destacó que se agravó el robo al ferrocarril en el corredor Puebla-Veracruz, ya que los delincuentes utilizan armas de alto poder como AK-47 y R-15, además que se rodean de mujeres y niños para que las autoridades no puedan responder.
El hecho de que se haya agudizado el robo en Veracruz y Puebla, tiene que ver con que el control del huachicol (combustible robado) ha hecho que los criminales busquen otras opciones, explicó la directiva.
Asimismo, destacó que una de las graves consecuencias de los robos a tren es que se transportan sustancias peligrosas que van a Ciudad de México o Querétaro, como el óxido de etileno o cloro, y en caso de accidente pueden provocar daños a la población o explosiones hasta de tres kilómetros a la redonda.
Según el reporte de la ARTF, el principal objetivo de la delincuencia es la sustracción de productos, el cual se incrementó nueve veces comparado con el primer trimestre.
La carga más robada son productos alimentarios (granos, vinos, licores y alimentos procesados) y artículos terminados de consumo, en menor medida productos relacionados con la construcción y del ramo automotor.
En el periodo de referencia se reportaron 2 mil 673 actos de vandalismo, de los cuales 90 por ciento conformaron afectaciones a tren como el cierre de angulares, y el restante correspondió a vandalismo en vía.
Aumentan accidentes
En el tercer trimestre de 2017 se reportaron 448 siniestros o accidentes en el sistema ferroviario mexicano, 13.7 por ciento más que en el primer tercio del año. En este rubro, 41 por ciento tienen causales ajenas al ferrocarril.
De los accidentes con causas ajenas al tren, se reportaron 163 arrollamientos de vehículos, en los que destacan tres entidades con la mayor participación: Nuevo León, Guanajuato y Estado de México.
En el rubro de siniestros ferroviarios aquellos relacionados a fallas en los procedimientos preestablecidos para la operación y tránsito de los trenes, aumentaron 43 por ciento, impulsados por los descarrilamientos, los cuales se observaron con mayor incidencia en Chiapas, Tabasco y Yucatán, lo que se atribuye al estado físico de la vía.
El número de incidentes relacionados con la presencia de vehículos no arrollados u otros objetos que obstruyeron el paso de ferrocarril, llegó a 90 casos debido al aumento de deslaves o derrumbes, inundaciones y objetos en la vía.