La madrugada del pasado 30 de noviembre se pusieron en marcha tres operativos en los linderos de Temixco y Cuernavaca, los cuales derivaron en el asesinato de cuatro mujeres, un adolescente y una bebé de tres meses, en circunstancias sin esclarecerse. También se detuvo a cinco hombres, una mujer y un adolescente.
Hasta ahora ningún informe ministerial da cuenta de la forma en que murieron las cuatro mujeres, el adolescente y el bebé, cuyos cuerpos presentan impactos de bala y presuntamente el tiro de gracia, según el abogado de la familia de las víctimas, Juan Manuel Cuéllar Miranda.
Una juez de Control puso en libertad a dos de los cinco detenidos por inconsistencias en la puesta a disposición, presuntamente por datos falsos aportados por los policías, por lo que consideró que las detenciones fueron ilegales.
El abogado Cuéllar Miranda lamentó que tanto la Comisión Estatal de Seguridad Pública como la Fiscalía ponderaron la tentativa de homicidio sobre el esclarecimiento de las seis víctimas encontradas en el domicilio referido.
“No le restamos valor a la vida de los policías, pero hay seis homicidios sin esclarecer por los cuales no hay un solo policía implicado en los hechos detenido ni investigado”, criticó.
Cuéllar Miranda detalló que en el informe policial homologado no se hace referencia a las armas encontradas, es decir, los policías no las pusieron a disposición, sino que éstas fueron halladas por el perito en criminalística, quien refirió en un informe oficial que la escena fue alterada.
“La Fiscalía debe comprobar que esas armas estaban con antelación en el domicilio, quién y qué arma se disparó y en contra de quién. Los policías dijeron que repelieron una presunta agresión con la fuerza necesaria, pero eso no avala masacrar a mujeres ni niños en un baño”, subrayó.
El abogado defensor adelantó que ninguno de sus representados dio positivo a la prueba de rodizonato de sodio, la cual se aplica para comprobar o no que una persona accionó un arma de fuego.