Aunque el sismo de magnitud 7.2 que el viernes por la tarde azotó la costa oaxaqueña no dejó víctimas mortales, hasta el momento se contabilizan 13 personas fallecidas y 16 lesionadas, por el desplome de un helicóptero Black Hawk perteneciente a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en Santiago Jamiltepec.
El sismo, que tuvo su epicentro a 11 kilómetros de Pinotepa Nacional, causó miedo en la población de distintas comunidades, por lo que en Jamiltepec algunas familias prefirieron dormir en las calles y espacios abiertos. Precisamente por el temor las 13 víctimas mortales se encontraban pernoctando en un campamento al aire libre, en la colonia Aviación.
Lo que debía ser un refugio seguro por el constante crujir de la tierra se convirtió en escenario de la tragedia cuando por la noche cayó la unidad militar en la que viajaban el gobernador Alejandro Murat Hinojosa y el secretario de Gobernación, Alfonso Navarrete Prida, quienes se trasladaban a la región para supervisar los daños que dejó el sismo.
El accidente ocurrió a las 22:15 horas y la aeronave que cayó fue la UH-60M, de la Fuerza Aérea Mexicana, con matrícula 1071. Sobre el desplome, la Vicefiscalía Regional de la Costa en Oaxaca informó que será la Procuraduría General de la República (PGR) la que investigue los hechos por tratarse de un delito federal.
Entre las víctimas fatales se contabilizan tres menores de edad, un bebé de cuatro meses, dos niñas de aproximadamente nueve años. Además, de cinco mujeres y cuatro hombres adultos. Sus cuerpos comenzaron a entregarse a los familiares alrededor de las 04:00 horas. En el lugar perdieron la vida 12 de ellos y uno más en el hospital.
Hasta la tarde del sábado, el Ejército mantenía acordonada el área del accidente, mientras que el Ministerio Público efectuaba las diligencias correspondientes. Los 21 lesionados, incluidos funcionarios federales y estatales, fueron trasladados a hospitales de la costa para su atención médica.
Sedena asume responsabilidad. La tarde del sábado el secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda, arribó a Santiago Jamiltepec para reunirse con los familiares de las personas fallecidas a causa del desplome del helicóptero militar y en el encuentro se asumió responsable del siniestro.
“Es importante que sepan que la Sedena asume totalmente su responsabilidad por lo que aquí sucedió. No podría, ni tengo el poder de devolverles la vida a quienes se fueron, pero mi compromiso es estar pendiente de todos y cada uno de ustedes”, les dijo a los deudos. El secretario aseguró que la razón del accidente se debió a su “interés de venir a ayudar”.
Tras comprometerse a atender las necesidades de quienes perdieron a familiares, el titular de la Sedena informó que visitará la comunidad cada mes para apoyar en la recuperación de la localidad.
Agregó que existe la disposición de brindar atención médica y sicológica a los afectados, así como una indemnización. También indicó que se brindará apoyo para reconstruir las casas que quedaron destruidas por la aeronave. Cada familia, notificó, será atendida de manera individual.
Acompañado por el secretario de Desarrollo Social, Eviel Pérez Magaña, y el general Aragón Zapata, indicó que será este último el encargado de atender las problemáticas que surjan tras el accidente.
Uno de los representantes de las familias pidió becas vitalicias para los niños que perdieron sus viviendas. Al respecto, Cienfuegos señaló que se revisarán las medidas y se coordinarán apoyos para los hijos y las esposas de los fallecidos.
Aeronave fue comprada a EU en 2014
Los Black Hawk UH-60M, con que cuenta la Secretaría de la Defensa, forman parte de un paquete de compra que se realizó en 2014 al Departamento del Estado de EU. Las 18 aeronaves son de última generación: helicópteros blindados, que cuentan con visión nocturna, adaptabilidad de armamento para operaciones especiales, además de que puede ser utilizado en misiones de rescate o evacuación, pues tiene la capacidad de transportar 6 camillas. Los UH-60M son la última versión del legendario Black Hawk.