La Comisión Nacional de Seguridad (CNS) reconoció que México carece de continuidad en las políticas públicas en materia de seguridad, así como de una debilidad de algunas policías estatales y municipales, quienes reciben bajos salarios y escasas prestaciones.
Renato Sales Heredia, titular de la CNS, mencionó que ambos problemas, forman parte de los factores internos y externos que originan la violencia e inseguridad en el país.
El funcionario indicó que es necesario continuar con el fortalecimiento de la Policía Federal y otorgar capacitación conjunta en el sistema de justicia penal acusatorio a policías, ministerios públicos y jueces mediante el método de casos prácticos, ya que el estado actual de la implementación del sistema es una “Babel procesal”.
Al participar en la conferencia Seguridad en México: desafíos y soluciones, el Comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia se pronunció por la construcción de policías, respetadas, eficaces y eficientes, que permitan transitar de un modelo de seguridad pública, meramente reactivo, a uno de seguridad ciudadana, preventivo, en el que el policía resuelve problemas de convivencia cotidiana”, informó la dependencia.
Según el comunicado, la postura de Renato Sales Heredia la realizó durante la conferencia “Seguridad en México: desafíos y soluciones", efectuada el pasado 3 de febrero en la Universidad de Harvard, donde dijo que el trato diferenciado y discriminatorio en la Constitución hacia los operadores del sistema de justicia, policías, fiscales y peritos, y la aparejada necesidad de reformar el artículo 123, apartado B, fracción XIII, que permite la aplicación retroactiva de la ley en perjuicio de dichos operadores, para ser removidos del cargo, y quienes aun si comprueban judicialmente que fueron injustamente removidos, no les permite reincorporarse al servicio.
“También destacó la importancia de fortalecer la vocación policial por medio de la profesionalización, para que las personas que quieran ser policías puedan estudiar la licenciatura en ciencias policiales en escuelas públicas y privadas”.
Entre los factores externos señaló que se encuentra la alta demanda de opiáceos y las modificaciones a algunas políticas públicas de salud en Estados Unidos, así como el incremento en la producción de cocaína en Colombia.