La hermana de Evo Morales murió este domingo en la madrugada por COVID-19, confirmó el exmandatario boliviano, que se encuentra exiliado en Argentina.
“Para mí, Esther, fue como una madre”, escribió Morales en su cuenta de Twitter, al tiempo en que lamentó que por razones políticas no pudiese despedirse de su familiar.
La hermana del expresidente falleció a los 70 años en un hospital de la ciudad de Oruro, a 120 kilómetros al suroeste de La Paz.
Medios de prensa indicaron que Esther Morales no pudo ser ingresada en un hospital antes debido a la escasez de oxígeno en centros médicos por causa de las protestas con corte de rutas de parte de seguidores del exgobernante en rechazo a la postergación de las elecciones presidenciales programadas para octubre.
Mientras tanto, la policía informó que las carreteras fueron despejadas en gran parte el sábado tras doce días de protestas en todo el país. Un acuerdo político permitió sellar la fecha de los comicios mediante ley para el 18 de octubre.
Las autoridades temen que las protestas multitudinarias hayan acelerado los contagios de COVID-19, que hasta este día sumaban 99 mil 146 positivos y cuatro mil tres decesos, según informó Virgilio Prieto, director de Epidemilogía del Ministerio de Salud.
Bolivia busca zanjar una crisis política que devino tras las elecciones de octubre del año pasado anuladas por sospechas de fraude, lo que encendió violentas protestas entre seguidores y opositores de Morales que derivaron en la muerte de 36 personas. Morales renunció y se marchó al exilio tras 14 años en el poder.
Morales no es candidato para los comicios de octubre, pero su partido izquierdista el Movimiento al Socialismo (MAS) mantiene una escasa ventaja en las encuestas frente a los divididos rivales de centro y de la derecha.