El Ejército de Bolivia saldrá a las calles para recuperar el control del país ante la ola de protestas y manifestaciones en rechazo del Golpe de Estado contra Evo Morales.
En un mensaje al pueblo boliviano, el comandante William Kaliman, del Alto Mando Militar, confirmó que las Fuerzas Armadas ayudarán a la policía nacional en sus funciones para evitar un posible "derramamiento de sangre".
Kaliman indicó que la policía actualmente se encuentra "rebasada" y que la fuerza militar se apega al mandato constitucional de preservar el orden y la paz.
El mando castrense informó que se aplicará el uso de la fuerza en "manera proporcional" y acusó que los "actos vandálicos" buscan desestabilizar al país.