Por presunto desvíos de recursos, el alcalde electo de San Andrés Tuxtla, Octavio Pérez, solicitó al Congreso local una auditoría al actual presidente municipal Manuel Rosendo Pelayo correspondiente a la Cuenta Pública del 2015.
Para ello entregó toda la documentación correspondiente al presidente de la comisión de Vigilancia, Juan Manuel de Unanue Abascal “la ley es muy clara cuando existe un señalamiento directo y las cuentas públicas cuando son aprobadas se pueden volver a revisar y aquí el señalamiento es claro porque se puede presumir de un delito al no haberse licitado la compra de luminaria.”
En ese sentido, Pérez Garay, resaltó la importancia de que se abra los expedientes de la Cuenta Pública del 2015 “porque queremos conocer cómo se encuentran las finanzas de nuestro municipio, porque una de las deudas que se tienen del orden federal es de 23 millones de pesos por la retención de los impuestos de los trabajadores que no ha sido reportado a Hacienda, y quién sabe dónde fue a parar”.
Necesitamos, dijo, la intervención en San Andrés Tuxtla, “porque las Finanzas están en su peor estado de la historia, traemos una deuda acumulada de más de 100 millones de pesos, la más grande en la historia del municipio, sobre todo presentó pruebas del mal manejo que se realiza, se trató de una adjudicación directa de la compra de luminarias de 36 millones de pesos, cuando esto tuvo que hacer una licitación nacional como lo marca la ley y el manual del Órgano de Fiscalización y para beneficiar a terceros lo hacen de manera directa.”