Las integrantes del equipo mexicano de Softbol prefirieron llevarse almohadas y edredones de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, por lo que tiraron a la basura el uniforme con el que compitieron para representar a nuestro país en la justa deportiva.
Así lo informó Carlos Padilla Becerra, presidente del Comité Olímpico Mexicano (COM), durante una entrevista que le concedió a la periodista Azucena Uresti.
Durante la conversación, que fue transmitida a través de la señal de Grupo Fórmula, el funcionario manifestó el descontento que generó esta desafortunada situación.
Cabe recordar que la situación salió a la luz tras la denuncia realizada por las pugilistas Brianda Tamara y Esmeralda Falcón, quienes no dudaron en lamentar que fuera tirado a la basura un recuerdo de la participación de México en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
¿Por qué el equipo mexicano de Softbol tiró su uniforme?
La Federación Mexicana de Softbol declaró que investigará por qué las jugadoras tiraron su uniforme; además, se ofreció una disculpa a quienes se hayan sentido ofendidos por el hecho.
Por su parte, el presidente del Comité Olímpico Mexicano (COM) destacó que las deportistas prefirieron llevarse los edredones y las almohadas que estaban en los cuartos de la Villa Olímpica donde se hospedaron.
“En el asunto del sobreequipaje, nunca ha habido, en ese asunto, un problema. El Comité Olímpico Mexicano considera dentro de sus gastos el sobreequipaje de regreso al país”, aseguró Carlos Padilla Becerra.
“En cinco habitaciones se llevaron la ropa de cama, eso quizá sea lo menos importante. El asunto es que tiraron ese uniforme indebidamente a la basura, cuando hubieran podido dejarlo en la cama”, destacó.
El presidente del Comité Olímpico Mexicano (COM) expresó que esto también es grave porque, en vez de dar la ropa a quien más lo necesita, las integrantes del equipo mexicano de Softbol optaron por tirar sus uniformes a la basura.
“En el programa de Solidaridad Olímpica, siempre que vamos a unos juegos, al final se acumulan los uniformes o la ropa que ya no se llevó el atleta; se regala en el país anfitrión para la gente que lo requiera”, dijo.