Tras la toma del Palacio Municipal y la irrupción del Salón de Usos Múltiples así como una bodega del DIF de Rafael Delgado, pobladores de Jalapilla descubrieron una gran cantidad de despensas que envió el DIF estatal y que no se entregaron desde que comenzara la pandemia, lamentablemente muchos productos caducaron y se echaron a perder en los almacenes.
Cansados de la indiferencia de la alcaldesa, Isidora Antonio Ramos, habitantes de Rafael Delgado irrumpieron en el Palacio Municipal a casi 12 horas de iniciadas las manifestaciones por la clausura del Panteón Ejidal de la comunidad de Jalapilla.
Cerca de las 21:00 horas del miércoles, los pobladores determinaron ingresar al Salón de Usos Múltiples donde se tenían almacenadas cajas de productos básicos del sistema DIF Estatal, es de mencionar que algunos de los productos ya se encontraban inservibles al presentar fechas de caducidad pasada, como la harina de maíz, algunas latas de atún y sobres de leche en polvo.
Posteriormente los pobladores irrumpieron en las oficinas del DIF municipal de donde extrajeron miles de despensas, que se encontraban en bolsas de plástico.
En el salón sacaron cajas de despensas del DIF Estatal, las cuales fueron sacadas y repartidas entre los pobladores.
Tras repicar las campanas de la iglesia de la cabecera municipal, cientos de pobladores se arremolinaron en la bodega del DIF, para extraer los productos básicos, algunos de ellos indicaron que a pesar de ser un municipio indígena y estar en carencias por la pandemia, a la fecha no habían recibido ningún tipo de apoyo por parte de las autoridades municipales, pues los apoyos los entregaban a los allegados de los empleados municipales.
En este espacio se encontraron más mil despensas y los habitantes a pie, en taxis, carretillas, bicicletas o diablitos, transportaban el apoyo alimentario y no sabían si dar gracias a la alcaldesa por la despensa o decirle otras cosas más sobre el tema del cementerio.