Los taxistas de la región de Orizaba no cuentan con alguna capacitación por parte de personal de Salud o Protección Civil para saber cómo actuar en caso de que algún pasajero presente alguna complicación en su salud en el interior de la unidad.
En entrevista, el presidente de la Central de Taxis Plus del Valle Pablo Carrera mencionó que hasta el momento la única herramienta con la que cuentan es la higienización de sus unidades.
“Los compañeros portan el cubrebocas, se les da gel a los pasajeros y hasta algunos traen guantes, pero de ahí en fuera es todo”.
Cuestionado sobre los casos donde se han visto que a los ruleteros se les manda a cuarentena por contacto con los pasajeros con síntomas de COVID-19, el entrevistado dijo que ese es el riesgo al que se enfrentan a diario.
“Es un riesgo que tendremos mientras siga la pandemia, por eso cada semana a se lleva a cabo la sanitizació de las unidades y los compañeros llegan a sus domicilios y se higienizan”.
El dirigente taxista dio a conocer que las unidades cuentan con un certificado de que está libre de virus y bacterias pues se ha limpiado con un líquido especial para garantizar que el pasajero vaya seguro sin riesgo de contaminarse de COVID-19.
Sobre la postura del pasajero que se niega a usar el cubrebocas, este dijo que se le hace saber al usuario que debe portar esa protección, pues de lo contrario se le niega el servicio.
Y dijo que no es por no querer llevar o trasladar al pasaje, pero se debe tener conciencia que pudiera ser trasmisor del patógeno y ser asintomático por lo que debe cuidar a los que están a su alrededor.
“Tenemos la indicación de parte de Tránsito y Transporte Público que no podemos subir a una persona sin el cubrebocas porque nos hacemos acreedores a una infracción”.
Aunque dijo que no ha sucedido y tampoco ha tocado a los agremiados, se ha dicho que la multa es de los 185 pesos por traer personas sin el cubrebocas.