El presidente de la Cámara de Comercio en Orizaba, Francisco Jiménez Haces lamentó que ante la pandemia del COVID-19 se rebelen los dueños de bares y cantinas para exigir que se les permita abrir negocios con la supuesta garantía que se respetarán los protocolos sanitarios.
El entrevistado se pronunció en contra de que se venda cerveza o bebidas embriagantes, pues dijo que eso atrae las masas y con ello, se corre el riesgo de contraer contagios.
En cuanto a los restaurantes, dijo que es necesario abrir porque es una actividad esencial pero se deben tomar las medidas precautorias y que se prohíba la venta de alcohol, porque de hacerlo, esto atrae las masas y sube el volumen de los comensales y sin duda generará focos de infección.
Comentó que en Orizaba está bastante bien controlado porque no se ha permitido abrir a restaurantes que no tengan las medidas precautorias.
En otro orden de ideas, dijo que el cierre de negocios cada vez aumenta, y en algunos giros ya se han cerrado comercios y se tienen pérdidas de entre el 80 y 85 por ciento, aunque de manera global, se anda en un 70.
En esas situaciones se encuentran los restaurantes, bares y cantinas que les ha pegado mucho y también los comercios de jarcería así como locales con venta de artículos varios como lápices labiales, maquillajes, peluches, y demás.