Ante el aumento de secuestros en la región de Orizaba, existen dos hipótesis que deja entrever la razón de la problemática, la primera es el nulo trabajo por parte de la Secretaría de Seguridad Pública y la otra sería la complicidad con grupos delictivos y de ahí que operen en la impunidad, señaló el representante del Grupo Regional Independiente de Taxistas Orizaba, Jairo Guarneros Sosa.
Y es que dijo que la zona de Rafael Delgado en las localidades de Novillero Chico y Las Sirenas, o en Río Blanco en el tramo Vicente Guerrero; en Ixhuatlancillo en la localidad de Rancho Palas o sobre la carretera estatal Mariano Escobedo-La Perla o El Trébol en Ixtaczoquitlán son zonas catalogadas por los ruleteros como focos rojos, pero la autoridad no lo ve.
"Y eso es muy curioso, los únicos que lo observamos somos nosotros, la SSP no lo observa y es un dato curioso por donde dejan las unidades".
Es por eso que se atrevió a señalar que ante el aumento de secuestros se desglosan dos temas: la capacidad de investigación por parte de Seguridad Pública o la complicidad.
"En este último tema sí es preocupante porque entonces se entendería que por eso actúan con impunidad esa banda de secuestradores en la región".
Comentó que los usuarios coludidos los abordan en Orizaba y en el lugar donde los dejan, es donde los secuestran o les quitan las unidades.
"Los abordan en Orizaba y concretamente se los llevan a Rafael Delgado a Novillero Chico o a Las Sirenas, una vez que supuestamente dejan el pasaje y van saliendo o hay piedras o sale gente armada y ahí les quita las unidades, eso pasa regularmente en días domingo".
Explicó que los casos no trascienden porque los familiares de los taxistas no denuncian y no es que no quieran, sino que los secuestradores los presionan para que no lo hagan y para que nadie más se entere, pues se pone en riesgo la integridad de su pariente.
Comentó que los retenes sí funcionan, pero se tienen que afinar pues cada quien tiene que hacer su tarea. "La policía tiene que hacer su tarea no es únicamente pedirle su identificación al conductor que es un poco lo que hemos platicado nosotros con el encargado de la Policía en Orizaba, sino también buscar otras estrategias".
Expuso que, si la Policía que está en el retén cree que el secuestrador va a estar armado, se equivocan porque si lo paran, lo van a detener y quién o quiénes los plagia es donde dejan a su pasaje.
Ante el aumento de secuestros en la región de Orizaba, existen dos hipótesis que deja entrever la razón de la problemática, la primera es el nulo trabajo por parte de la Secretaría de Seguridad Pública y la otra sería la complicidad con grupos delictivos y de ahí que operen en la impunidad, señaló el representante del Grupo Regional Independiente de Taxistas Orizaba, Jairo Guarneros Sosa.
Y es que dijo que la zona de Rafael Delgado en las localidades de Novillero Chico y Las Sirenas, o en Río Blanco en el tramo Vicente Guerrero; en Ixhuatlancillo en la localidad de Rancho Palas o sobre la carretera estatal Mariano Escobedo-La Perla o El Trébol en Ixtaczoquitlán son zonas catalogadas por los ruleteros como focos rojos, pero la autoridad no lo ve.
"Y eso es muy curioso, los únicos que lo observamos somos nosotros, la SSP no lo observa y es un dato curioso por donde dejan las unidades".
Es por eso que se atrevió a señalar que ante el aumento de secuestros se desglosan dos temas: la capacidad de investigación por parte de Seguridad Pública o la complicidad.
"En este último tema sí es preocupante porque entonces se entendería que por eso actúan con impunidad esa banda de secuestradores en la región".
Comentó que los usuarios coludidos los abordan en Orizaba y en el lugar donde los dejan, es donde los secuestran o les quitan las unidades.
"Los abordan en Orizaba y concretamente se los llevan a Rafael Delgado a Novillero Chico o a Las Sirenas, una vez que supuestamente dejan el pasaje y van saliendo o hay piedras o sale gente armada y ahí les quita las unidades, eso pasa regularmente en días domingo".
Explicó que los casos no trascienden porque los familiares de los taxistas no denuncian y no es que no quieran, sino que los secuestradores los presionan para que no lo hagan y para que nadie más se entere, pues se pone en riesgo la integridad de su pariente.
Comentó que los retenes sí funcionan, pero se tienen que afinar pues cada quien tiene que hacer su tarea. "La policía tiene que hacer su tarea no es únicamente pedirle su identificación al conductor que es un poco lo que hemos platicado nosotros con el encargado de la Policía en Orizaba, sino también buscar otras estrategias".
Expuso que, si la Policía que está en el retén cree que el secuestrador va a estar armado, se equivocan porque si lo paran, lo van a detener y quién o quiénes los plagia es donde dejan a su pasaje.