Este sábado, integrantes del Colectivo de Familiares de Desaparecidos Orizaba-Córdoba, acudirán a la Fiscalía General a verificar si alguno de los 166 cuerpos encontrados en una fosa clandestina, corresponden a sus seres queridos.
“Se había planeado que iban a mostrar los hallazgos en cuanto a ropa, objetos y credenciales que fueron localizados el jueves, nos van a mostrar la carpeta de todo lo que tienen en el catálogo”.
Dijo que tras conocerse la noticia que diera el Fiscal del estado, todos los colectivos solicitaron ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos y la nacional, de manera global e individual como parte de una estrategia, el que les permitirán acudir para un posible reconocimiento.
Admitió que a pesar del dolor que representa para las familias el saber que su ser querido ya no regresará nunca más, en cierta forma también esto les permite cerrar ese capítulo.
“Yo creo que no es la manera en que nadie quisiera encontrar a sus hijos o algunos de sus seres queridos, pero dentro de todo el contexto que estamos viviendo, al menos esas familias van a tener un poco de paz en su corazón de saber dónde están ya sus hijos. Se va a acabar esa incertidumbre que nos va acabando poco a poco por no saber si están bien, si comen, duermen, son golpeados o lastimados”.
Señaló que la noticia sobre el hallazgo de 32 fosas donde encontraron 166 cráneos no aminora el dolor de familiares de desaparecidos, y aseguró que este 7 de septiembre, cumple seis años que su hija Rubí desapareció y “no estoy preparada para identificarla y enterrarla”.
Agregó que “hay muchas familias que están buscando a sus familiares, hija, hijo, esposo, hermano, amigo. El hallazgo que acaba de anunciar el Fiscal General del Estado no aminora el dolor que tenemos por la desaparición de nuestros seres queridos, pero al menos el que te lo regresen o sepas dónde está, da un poquito de paz al corazón y me atrevo a decirlo porque en el colectivo hemos regresado a 10, desafortunadamente sin vida, pero mis compañeras no cesan de llorarles, aunque ya saben a dónde ir a visitarlos”.
Indicó que la ubicación de las fosas surge de una investigación ministerial y los colectivos de Veracruz no tenían conocimiento de ella y lo único que saben es lo que el fiscal Winckler anunció en conferencia de prensa.
“Créeme que si la mayoría de familias supiéramos donde están ya estaríamos partiendo para ese lugar. Lo más viable y coherente es mantener la secrecía porque la desesperación e incertidumbre de que un hijo pudiera estar ahí nos impulsará a ir al lugar”.
Aunque comentó que el trabajo de identificación va más allá “porque no creo que sea muy fácil, aunque tampoco imposible, porque están trabajando en coordinación con la Policía Científica para lograr identificarlos porque ellos tenían una identidad que les fue arrebatada de la manera más cruel y lo único que pedidos es que les regresen su identidad”.