La Hemodiálisis es fundamental para que los pacientes con insuficiencia renal puedan tener calidad de vida, por lo que la suspensión del tratamiento puede traer efectos negativos en su salud e incluso la muerte.
De acuerdo con la doctora Fabiola Hernández, tanto la hemodiálisis como la diálisis peritoneal son procedimientos que sustituyen la labor del riñón cuando este pierde su capacidad, la cual consiste en filtrar las sustancias negativas de la sangre.
"Una persona que tiene insuficiencia renal no puede vivir sin hemodiálisis o diálisis peritoneal, a los pacientes ya no les funcionan los riñones y estos son vitales porque depuran la sangre y si nosotros no depuramos la sangre, por decirlo en un término no médico, nos empezamos a intoxicar y se hace un círculo vicioso en donde nos saturamos de urea y creatinina y demás productos de desecho que normalmente se eliminan por la orina y que ya no salen, entonces el paciente va directo a la muerte", indicó.
Explicó que estos tratamientos se deben realizar aproximadamente cada tercer día para ir eliminando las toxinas que están en la sangre pues de lo contrario comienzan a registrarse afectaciones en la salud del paciente, mismas que dependen de la gravedad del caso.
Finalmente, reiteró la importancia de que estos pacientes puedan contar de manera constante y oportuna con su tratamiento pues de lo contrario los efectos de no purificar su sangre pueden ser fatales.