Luego de 30 años de estar prácticamente "arrumbado" en un clóset de la sacristía de la parroquia del Calvario, el Santo Entierro -como se conoce a la imagen de Jesús bajado de la cruz- fue rescatado el 16 de julio del 2012 por el joven Rafael Aguilar González y desde el 2014, hace cinco años, volvió a salir a las calles del centro de Xalapa, en la procesión del Silencio, acompañando a la Virgen de la Soledad que se realiza el Viernes Santo.
"Esta imagen yo la rescaté del abandono. Esta es una imagen que tiene como 180 años o más, es de madera, es arte sacro más que nada. Lamentablemente hubo un padre que lo mandó a la sacristía, ahí tenemos un clóset... lo retiró porque decía que les daba miedo a los niños, entonces estuvo mucho tiempo abandonado, 30 años. Lamentablemente, arriba de él tenían cajas, tenían bolsas", contó en entrevista luego de vestirlo y ponerlo al pie del altar donde los devotos acuden a venerarlo.
Rafael investigó y ayudado por un sacristán y una asidua a esta parroquia, ubicada en la calle Revolución, en el centro de Xalapa, encontró la imagen que incluso, puede tener alrededor de dos siglos.
"Le platiqué a mi abuelita y le pregunté si no había un Santo Entierro aquí y ella me dijo que cuando era joven, por allá de los años 50, exponían un Santo Entierro y le dije ¿dónde está? Le platiqué al antiguo sacristán que había aquí y con una señora que nos arregla las flores y nos dijo que estaba aquí".
El Santo Entierro tiene una cruz de espinas reales y aún se le pueden atravesar los clavos en las muñecas. Es parte del arte sacro de esta antigua iglesia que requiere ser restaurada.
"Esta es una imagen que me comenta mi abuelita que la crucificaban. Era para crucificarse, atrás tiene su espalda flagelada. Anteriormente, cuando estaba en buenas condiciones, me comentan que lo crucificaban, pero ahorita ya no, por el estado en el que está. Está algo apolillado de aquí, porque es de pura madera. Su cabeza se le mueve... está algo deteriorado, esperemos juntar dinero para restaurarlo. Hay que pedirle permiso al INAH".
Rafael Aguilar González considera milagroso al Santo Entierro del Calvario, a quien no deja de cumplir la promesa que le hizo antes de sacarlo de nuevo a la vista y culto de los católicos que acuden a este antiguo templo.
"Yo le hice una promesa a él, que yo quería sacarlo y que si lo sacaba me ayudaría a conseguir trabajo porque yo acababa de salir de la universidad. Entonces cuál fue mi sorpresa que un día me armé de valor y con el antiguo sacristán y con la señora que hace los arreglos florales lo bajamos. Se lo llevó a su casa en lo que yo mandé a restaurar su urna, eso porque una semana antes de que yo le hice la promesa, encontré trabajo. Fue para mí como un milagro".
Así, la noche de este viernes será llevado en procesión en su transparente urna, siendo una de las principales imágenes que se veneran, en este día también llamado Viernes de Dolores, donde se recuerda la pasión y muerte de Cristo.