El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó este viernes un decreto para formalizar y reforzar las acciones de su gobierno que buscan enfrentar la crisis hídrica en Nuevo León y garantizar el abastecimiento de agua hasta por 10 años más.
“Las soluciones que nosotros estamos proponiendo y se van a llevar a cabo con apoyo del gobierno del estado y municipales nos van a permitir seguir trabajando hacia delante, vamos a poder garantizar agua ocho o 10 años hacia adelante”, adelantó el mandatario.
A través del decreto que se publicará este viernes al medio día, se faculta a la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para que junto con el organismo estatal de agua potable y el gobierno estatal, garanticen el acceso al agua potable de calidad en 18 municipios de la Zona Metropolitana de Monterrey y con esto beneficiar a los habitantes dentro y fuera de la región.
El decreto además contiene cuatro acciones a mediano y corto plazo que versan sobre el financiamiento del acueducto El Cuchillo II, la construcción de la presa La Libertad, acuerdos con la zona citrícola y el suministro de carros tanque con agua.
Las nuevas medidas buscan atender el déficit de líquido que existe en la zona, y del cual solo ha podido cubrirse la mitad. Según explicó el mandatario federal, de los tres mil litros por segundo que hacen falta solo se han logrado suministrar mil 500 litros por segundo a partir de las acciones aplicadas previamente, como son la reparación de pozos y el apoyo de las industrias.
Esta situación calificada como “crítica” se planea resolver a mediano plazo con la construcción del acueducto El Cuchillo II cuya construcción finalizará en año y medio aproximadamente y permitirá disponer de cinco mil litros de agua por segundo.
“Con este acueducto vamos a tener cinco mil litros por segundo más lo que aporte la presa Libertad, entonces con esto se enfrenta el problema y se puede pensar en el mediano y largo plazo”, expuso el mandatario y advirtió que la situación no se resolverá pronto.
“Yo diría que se ha avanzado pero sigue habiendo escasez de agua y va a llevar más tiempo todavía, aun cuando ya empezó a llover”.
Ante la emergencia de sequía que enfrenta no solo Nuevo León sino tres cuartas partes del país, Obrador señaló que el agua es un bien que ya no debe ser comercializado ni acaparado por la industria.
“Se está haciendo conciencia de que ya no es posible seguir disponiendo de agua para propósitos industriales, comerciales porque se tiene que cuidar el agua, tiene que haber planeación”, apuntó.
Las nuevas cuatro medidas están detalladas en el decreto ratificado este viernes por el presidente y abordan los siguientes temas.
La construcción del acueducto es una de las acciones a mediano plazo para abatir el déficit en la región que alcanza los 3 mil litros de agua por segundo. Con este proyecto se permitirá disponer de 5 mil litros de líquido por segundo, más de lo que se requiere para enfrentar la crisis actual.
El Gobierno Federal contempla una inversión total de 15 mil 700 millones de pesos, de los cuales Banobras aportará 7 mil 850 millones, mientras que el estado de Nuevo León y los gobiernos municipales otorgarán 4 mil 710 y 3 mil 140 millones de pesos respectivamente.
El gobierno estatal alcanzará el monto asignado con un cupón cero de Banobras por 3 mil 500 millones de pesos.
La construcción de la presa La Libertad está en desarrollo y se prevé que aporte un poco más de mil 500 litros de agua por segundo.
Del 2019 hasta el presente año, el Gobierno Federal ha invertido 3 mil 301.99 millones de pesos en su construcción y estima que para 2023, el año en que finalizarán las obras, se inviertan mil 118.5 millones de pesos más.
El agua de la presa será dirigida a la planta potabilizadora San Roque a través de un acueducto de 100 kilómetros.
El Gobierno Federal, como se había informado en días pasados, llegó a un acuerdo con los productores de la zona citrícola cercana a la zona metropolitana de Monterrey para abastecerla con mil litros de agua por segundo.
A partir del 27 de julio y durante dos meses se operará el bombeo en el Canal Chapotal al Acueducto Linares-Monterrey para la distribución de agua a la red. El bombeo se efectuará las 24 horas del día por 14 días (en promedio dos días por semana).
Con esta conexión se planea proveer a las zonas más vulnerables del estado donde no existe la infraestructura suficiente para hacer llegar el agua, indicó el director de la Conagua, Germán Martínez.
Se instruyó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para que apoye con 100 pipas adicionales a las 48 que operan actualmente como parte del programa DN III-E.
Estos vehículos llegarán a partir del 1 de agosto y junto con otros 14, abastecerán a 10 municipios de la zona conurbada en un horario de 6:00 a 19:00 horas.
Se destinarán 385.6 millones de pesos para la perforación, rehabilitación y mantenimiento de 220 pozos con el objetivo de incrementar los volúmenes de agua para uso público urbano.