La Secretaría de Salud del gobierno mexicano anunció este martes que el país ya entró en la Fase 3 por la pandemia del virus COVID-19, pues se prevé un crecimiento más rápido del número de contagios y un mayor número de hospitalizaciones. Los médicos y enfermeras se mantienen en la primera línea de riesgo por la falta de equipo de protección o por la mala calidad de estos equipos como el que recibió el IMSS el pasado sábado 18 de abril.
Desde que inició la etapa de prevención del virus COVID-19 en México, médicos y enfermeras del sistema de salud han demandado equipo de protección profesional. Las protestas en diversos estados han sido recurrentes. Los reclamos son por la falta de guantes, caretas, batas, zapatos, pruebas médicas, entre otros, e incluso han pedido ayuda en las redes sociales para poder adquirir estos insumos.
Personal de salud del ISSSTE en CDMX protestaron la mañana de este martes para exigir equipo de protección. “Estamos en la guerra sin armas”, expresaron. Además, denunciaron que dos médicos, el internista Daniel Leglis y el pediatra Arturo Tapia, y la enfermera Olga Blandino, murieron a causa del virus pero las autoridades de la institución no lo reconocen así.
La respuesta de las autoridades ha sido lenta, han desestimado las demandas, los insumos adquiridos son de baja calidad, y la vida del personal de salud está en riesgo.
El pasado fin de semana llegó un tercer cargamento de insumos médicos. El Director del IMSS Zoe Robledo informó en su cuenta de Twitter que eran 192 mil 400 caretas protectoras para el personal de salud de la institución.
Robledo y la subsecretaria de Relaciones Exteriores, Martha Delgado, recibieron, en el Aeropuerto de la CDMX, el cargamento proveniente de China en el vuelo AM 9849 PVG-MEX de Aeroméxico.
Ahí, frente a la prensa, Zoe Robledo y la doctora Concepción Grajales, titular de la Coordinación de Control Técnico de Insumos del IMSS, fueron testigos de la prueba que realizó Martha Delgado de una careta de protección frente a las cámaras.
Martha Delgado abrió el paquete, precisó que esta careta “es de las buenas, señores. Son las que llegaron en este vuelo”.
Luego se colocó un cubrebocas y al intentar ponerse la careta de protección, la banda de esta se rompió. Zoe Robledo solicitó rápidamente otro paquete, pero la baja calidad del producto ya estaba grabada en video.
#SinMurosNoticias
— Sin Muros (@SinMurosMx) April 21, 2020
?? Cómo serán los de mala calidad ??????
Entregan a médicos y enfermeras insumos de “buena calidad”.https://t.co/KhMkAUCxFk pic.twitter.com/2cCnJS3qub
Luego las funcionarias tuvieron que hacer otro video para demostrar cómo se coloca la careta para no romperla.
En las redes sociales las criticas no se hicieron esperar, pues para usar el equipo médico de protección, dijeron algunos usuarios, era necesario tomar un curso de “mascarología”.
Estos insumos de baja calidad se suman a otro cargamento que fue entregado en diversos estados al sector salud y provocó el enojo de gobernadores panistas por la “pésima” calidad de los productos.
“Lamentable, preocupante e inaceptable” fue la frase con la cual los gobernadores anunciaron que devolverían al Gobierno Federal los insumos. Las fotografías de unas batas de papel, transparentes, y cubrebocas no profesionales inundaron las redes sociales y motivaron duras criticas contra el gobierno federal.
En el IMSS hay 114 mil enfermeras y 6 mil 500 médicos en riesgo. Hasta el 4 de abril habían fallecido a causa del COVID-19, 3 médicos y un enfermero.
En Chiapas 25 médicos y enfermeras fueron sometidos a aislamiento luego de que una enfermera fuera diagnosticada con el virus y su situación era considera como “muy grave” .
En Sonora 32 médicos y enfermeras de la jurisdicción sanitaria número seis fueron contagiados con el virus.