El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que se acabará la política de estímulos fiscales para impulsar el arte y la cultura.
En Palacio Nacional, se le preguntó si se recortaría la ayuda para los albergues de mujeres, y dijo que todo lo que signifique “justicia social” continuará, “eso y más. Lo que estamos haciendo es terminar con los gastos superfluos”.
Aclaró que se acabarán los estímulos fiscales para museos y otras obras. “Crearon toda esta concepción de la sociedad civil, satanizando al gobierno, estigmatizando al gobierno. ‘No, si las acciones se llevan a cabo a través del gobierno no son eficaces y además se roban todo; luego entonces, mejor denos a nosotros el dinero’. La política, por ejemplo, de deducir impuestos para fomento de arte, de la cultura. Presumir con sombrero ajeno. Una empresa que no paga impuesto se les regresan los impuestos para que ponga un museo de arte popular. Nada más que ese dinero no entró a la hacienda pública. Esa política no va a continuar. Vamos a cambiar las cosas”.
La alarma se activó en el sector cultural. Artistas consultados por El Financiero coincidieron en lo negativo de la propuesta.
“Hay dos opciones, una que el presidente esté pensando en quitar esos estímulos y el dinero equivalente colocarlo en la Secretaría de Cultura para que apoye directamente a los artistas y con eso volveríamos al pasado, donde no había una libertad creativa, sino un control sobre lo que se produce y la otra, que es el escenario peor, si no se considera que ese dinero se reponga, sería un destrozo enorme e irreparable”, dice la escritora Sabina Berman.
“En la política de que todos los privilegios tienen que caer, no entra la cultura. No pueden exigir austeridad a una comunidad que ha vivido en la precariedad”, advierte David Pslamon, director de Teatro Sin Paredes AC.
A la luz de la necesidad que tiene este país de mejores niveles educativos, advierte el músico y actor Mario Iván Martínez, se debe celebrar y arropar la producción artística autogestionada. “Si es a través de estímulos fiscales que otorguen empresas, está muy bien, porque el gobierno tiene una obligación histórica con el arte y la cultura de un país tan rico como el nuestro”.