El presidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), Rogelio Cabrera López, dijo que en los casos de abuso sexual al interior de la iglesia "no es suficiente pedir perdón", sino que es necesario "un cambio de perspectiva".
Afirmó que la iglesia priorizará su atención en la víctima, la escuchará y la acompañará en su proceso de sanación, además de que en la Diócesis "se lleven a cabo los procesos de denuncia civil, ofreciendo toda la cooperación eclesial para colaborar con la autoridad ministerial".
En un documento titulado Primeras consideraciones sobre el Encuentro de Protección de menores en Roma, el también arzobispo de Monterrey aseguró que se pondrá un mayor cuidado en la formación y selección de los sacerdotes de la iglesia católica, con el objetivo de "evitar tener sacerdotes que sean o representen un riesgo para los menores y las personas vulnerables".
Comentó que la CEM apoyará y supervisará en cada una de las diócesis del país "el protocolo de aplicación civil, conforme a la legislación sustantiva y adjetiva penal de los diferentes estados de la República".