Olha Sukhenko, alcaldesa del pueblo de Motyzhyn; su marido, Ihor Sukhenko, y su hijo, Oleksandr, fueron asesinados y enterrados en una fosa poco profunda, informó Anton Herashchenko, asesor del Ministerio del Interior ucraniano, mostrando sus cuerpos parcialmente cubiertos en la tierra.
Desde que las tropas rusas se retiraron de las ciudades y pueblos alrededor de Kiev, la semana pasada, las tropas ucranianas han avanzado, mostrando a los periodistas cadáveres de, según el Ejército local, civiles asesinados por las fuerzas rusas, casas destruidas y coches quemados.
No se ha podido verificar de forma independiente quién ha matado a la familia que se encuentra en la fosa a las afueras de Motyzhyn, al oeste de Kiev. Moscú ha negado haber atacado a civiles y ha dicho que informes similares de asesinatos fueron “montajes” para manchar el nombre del país.
“Aquí ha habido ocupantes rusos. Torturaron y asesinaron a toda la familia de la alcaldesa del pueblo”, dijo Herashchenko.
En respuesta, la inteligencia militar ucraniana ha difundido en su página web los datos personales de mil 600 soldados rusos, desde nombre y apellidos, hasta fecha de nacimiento y rango militar, integrados en las tropas que actuaron en Bucha, próxima a Kiev.