Como cada año en estas fechas, las calles de la capital del estado se encuentran semivacías, pues pocas personas se ven transitando por estas, al igual que automóviles.
Y es que los xalapeños han salido a otras ciudades a disfrutar de los días de descanso.
Otros más han preferido quedarse en su casa para descansar la desvelada por el festejo de fin de año, después de la cena y el brindis.
Es así como las calles y avenidas se ven inusualmente desiertas, en comparación al ajetreo cotidiano que se vive en Xalapa.