El Instituto Veracruzano de la Mujer es un elefante blanco que no atiende la problemática de violencia que hay ni los casos que se presentan, por lo que debería haber una rendición de cuentas para conocer en qué se aplican esos recursos, pues manejan un presupuesto de alrededor de 20 millones de pesos anuales, dio a conocer la directora del Colectivo Feminista Cihuatlahtolli, María de la Cruz Jaimes García.
Apuntó que el refugio para mujeres violentadas del colectivo dejó de recibir recursos desde hace dos años que inició la administración estatal, el cual funcionaba con aproximadamente 300 mil pesos por seis meses, de los cuales el gobierno anterior les daba 30 mil pesos para alimentos y 14 mil pesos para higiene personal y limpieza y con eso se apoyaban para tener lo básico, mientras que el resto lo aportaban ellos.
“El gobierno tiene un doble discurso, porque dice una cosa, pero en la práctica hace otra y realmente no están apoyando a los refugios ni dan la atención a la problemática de las mujeres”.
Ante todo eso y sin presupuesto decidieron cerrar el refugió de mujeres violentadas de Orizaba, pero no lo han hecho porque las mujeres siguen acudiendo a pedir apoyo y las llevan a Xalapa, pero ahí no las reciben.
Maricruz Jaimes García señaló que a la fecha se desconoce en qué se aplica ese recurso el IVM, pues siempre les pregunta a las mujeres agredidas si tienen una red de apoyo y esto significa tener familiares, entonces cuando les dicen que sí hay una hermana en otro estado, por ejemplo, les dicen que se vayan allá, sin saber si quiera si las recibirán.