De acuerdo con datos de la agrupación Marea Verde Altas Montañas, en lo que va de la cuarentena, la cual inició el 17 de marzo, se han registrado 18 asesinatos de mujeres, panorama que enfrentan las mujeres ante esta contingencia y de sus casos, no se ha tenido ninguna respuesta.
En rueda de prensa las activistas, Luz María Reyes Huerta, María de la Cruz Jaimes García expusieron que: “por respuesta hemos recibido, la negación de la violencia hacia las mujeres por parte del Ejecutivo nacional, la incapacidad del estado para responder de manera clara con sus responsabilidades de prevenir, atender, sancionar y erradicar la violencia hacia las mujeres en este tiempo de contingencia”.
Revelaron que durante el confinamiento a consecuencia de la contingencia sanitaria, en Veracruz han sido asesinadas 18 mujeres, tres de ellas en la región de Orizaba, una de la Sierra de Zongolica; de ese número, nueve fueron asesinadas dentro en su vivienda y dos de ellas quien les quitó la vida fue su pareja sentimental; una más había sido reportada días antes como desaparecida, del resto aun no determina la autoridad competente quién o quiénes fueron los responsables.
Agregaron que al menos dos mujeres de la región Córdoba-Orizaba, tomaron la decisión de quitarse la vida y ayer lunes, una mujer fue herida de bala por su esposo en la ciudad de Córdoba.
Las activistas señalaron que debido al confinamiento, las mujeres han enfrentado una mayor violencia hacia ellas y sus hijas e hijos, pues de acuerdo con las cifras de la ONU la violencia hacia las mujeres ha aumentado hasta en el 60 por ciento, un promedio de 155 mujeres violentadas cada hora, según reconoce el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
De la misma manera, acusaron que de nada sirve que se vivan tiempos de tecnologías, cuando el Estado no ha podido implementar estrategias eficientes como son las plataformas virtuales que permitan la realización de audiencia, convivencias, “esto podría facilitar hasta el trabajo de los jueces pues podrían resolver su trabajo en caso de convivencias virtuales, a fin de no continuar agraviando los derechos y se haga una realidad el interés superior de justicia”.
Asimismo admitieron que se han frenado los seguimientos de las denuncias que han presentado mujeres que ya tienen procesos principalmente relativos a juicios sobre la guarda y custodia de sus hijos e hijas, y debido al confinamiento se han paralizado y eso les genera violaciones a sus derechos humanos.
“Esto ha traído como consecuencia que muchas madres no puedan ver a su hijos, no avancen en los procesos judiciales y se les violente incluso de manera institucional, es menester destacar que la mayoría de los juicios a los que hemos hecho referencia se refieren a sustracciones que ha realizado los progenitores, de los cuales existe un subregistro importante, pero quienes acompañamos a víctimas de violencia, sabemos que ocurren a diario y ha sido frecuente en esta pandemia también y que dichas víctimas se enfrentan a esta grave parálisis judicial, madres que dejan de ver a sus hijos e hijas por horas, días, meses o incluso años”.
Señalaron que el que una mujer enfrente violencia, pueda y quiera denunciar al agresor se encontrará una Fiscalía con personal muy limitado debido a esta contingencia y solo podrá presentar denuncia y alcanzar las medidas mínimas de protección, pero para ello deberá esperar un promedio de cinco horas en dicha dependencia.
Pero además para dar continuidad a su denuncia, deberá esperar hasta el final de la contingencia, debido a que los servicios periciales se encuentran suspendidos.
“La pregunta es cuantas mujeres podrán hacerlo, cuando el agresor está en casa y al final tiene que regresar con él para continuar en riesgo, incluso aún mayor. La única posibilidad de que pueda ver en lo inmediato una consecuencia para su agresor es en el caso de que el agresor sea detenido en flagrancia”.