Para Carmen Beatriz López Portillo Romano, el país se está yendo por una barranca debido a los niveles de injusticia, de inequidad, violencia y corrupción.
La hija del expresidente de la República, José López Portillo, exhortó a parar esta situación, pero además hizo patente su preocupación ante el número elevado de feminicidios.
“No puede ser que en nuestro país haya tantos millones de mexicanos que vivan en pobreza alimentaria, no sólo extrema. No puede haber esos niveles de justicia, de inequidad”.
Entrevistada posterior a la firma de convenio de colaboración con el Ayuntamiento de Orizaba, con el cual se busca atraer diversos eventos culturales, la rectora de la universidad del Claustro de Sor Juana, dijo que el país se está desbarrancando, debido a la difícil condición que viven diversos sectores, como lo son los niños, las mujeres y los Pueblos Originarios.
Insistió en que México está en una situación difícil, en condiciones de injusticia que se debe resolver.
“Me indigna, estoy enferma por la violencia en contra de todos, de los jóvenes, de las comunidades originarias, en contra de los niños, somos el primer país de abusadores de niños en el mundo, ¿en serio?; el país en donde hay más mujeres muertas; en donde hay periodistas asesinados, ¿ya no?, ¿y la libertad de expresión?, ustedes están atreviéndose a decir cosas y ¡te matan!”.
Es más, apuntó que otro de los graves problemas que enfrenta el país, son los feminicidios.
“Actualmente en México están muriendo 9 mujeres al día asesinadas, es indignante, no podemos seguir así; en 2018: 34 mil 770 mujeres muertas, cada dos horas y media se mató a una, cuántos niños se mueren de hambre, por cuestiones de salud, porque no hay agua limpia, somos el primer país con niños obesos ¿en serio, nos tenemos que llevar las palmas en todo el horror? cuando tenemos esta riqueza, ¿caray, ya no, ¡yo ya!?”.
De su opinión sobre los programas sociales, la entrevistada dijo que se le debe de dar tiempo a esta estrategia que implementó el Gobierno federal.
“En el caso de la ayuda a los ‘ninis’, las estadísticas lo dicen: dos de cada diez jóvenes llegan a la Universidad, porque no tienen oportunidades por diversos motivos algunos muy graves. Tenemos que romper el círculo vicioso, y si la forma es empezarlos a capacitar que se haga. Tenemos que romper esos círculos viciosos".
Aseguró que a pesar de que la educación en México está enfocada en una cultura individual, es uno de los caminos para contrarrestar la difícil situación que vive el país, “es la educación y la cultura; a través de la cultura podemos, tiene que significar el espacio de recomposición social, tenemos que volvernos a sentir orgullosos y crear conciencia respecto a lo que está pasando, no podemos formar jóvenes que solamente estén interesados en mirarse el ombligo o en sí mismos o en sus propios intereses”.
Por ello calificó a la educación como una “acto de esperanza”, porque una sociedad libre, puede cambiar su forma de ser, “hemos destruido la educación en México, la hemos destruido, dejamos y terminamos siendo instancias de profesionalización, productividad, eficiencia, competitividad y en dónde dejamos la formación de los ciudadanos, de los seres humanos buenos, de gente comprometida, estamos formando seres humanos que solamente se interesan en sí mismos”.