El desempeño de la economía mexicana durante mayo reafirmó la expectativa de diversos analistas de que el país entró en una recesión técnica. Esto, porque se prevé una disminución del Producto Interno Bruto (PIB) de alrededor de 0.2 por ciento entre abril y junio, respecto al trimestre previo, con lo que acumularía dos periodos consecutivos en contracción.
El Inegi informó el viernes que el Indicador Global de la Actividad Económica (IGAE) se contrajo 0.3 por ciento a tasa anual durante mayo, en las cifras ajustadas por estacionalidad, mientras que respecto al mes previo reportó un nulo crecimiento y se estancó.
Analistas de Vector Casa de Bolsa prevén que la economía mexicana se contrajo 0.3 por ciento en el segundo trimestre, respecto al trimestre previo; Merrill Lynch y Banorte estiman una baja de 0.2 por ciento. Para Citibanamex y Santander el retroceso fue de 0.1 por ciento, según datos de Bloomberg.
En un documento titulado ‘La recesión (técnica) parece inminente’, J.P. Morgan señaló que los resultados de la actividad económica durante mayo estuvieron por debajo de sus expectativas, por lo que tuvo que ajustar a la baja sus pronósticos para el segundo trimestre.
“La economía ha estado débil desde hace algún tiempo, y el aproximado del PIB de mayo actual lo encamina a generar un segundo trimestre de crecimiento negativo, lo que sería equivalente a una recesión técnica”, indicaron los analistas.
Destacaron que anteriormente tenían un estimado de -0.2 por ciento de crecimiento para el segundo trimestre, pero la cifra fue revisada a -0.5 por ciento anual.
“Confirmamos nuestra estimación de crecimiento trimestral del PIB desestacionalizado para el segundo trimestre de 2019 de -0.1 por ciento”, indicaron por su parte analistas de Citibanamex.
En un reporte explicaron que además del débil crecimiento del IGAE en abril y mayo, los datos de junio, como ventas automotrices, de empleo y comercio exterior, sugieren que la debilidad de la economía continuó al final del trimestre.
“En cifras ajustadas por estacionalidad, la actividad económica presentaría una contracción de 0.2 por ciento, respecto al trimestre previo, hilando dos trimestres consecutivos en negativo”, apuntaron analistas de Banorte.
Explicaron que este resultado estaría impactado en buena medida por el sector industrial, para el que se estima una caída trimestral de 0.5 por ciento, mientras que para el sector servicios se estima un avance de 0.2 por ciento.
Más recortes
Analistas del banco Ve por Más prevén que el crecimiento del PIB podría recuperarse más adelante, aunque en menor medida a lo que esperaban meses atrás, debido a que el balance de riesgos ha adquirido un sesgo menos favorable.
“Es por ello que revisamos a la baja nuestro estimado de crecimiento para 2019 de 1.4 por ciento a 0.6 por ciento”, indicaron en un reporte.
La institución prevé que el sector externo seguirá apoyando el crecimiento económico en México, a pesar de que se está desacelerando.
No obstante, indicó que en este rubro podrían resurgir nuevas amenazas comerciales por parte de Estados Unidos, generando poca claridad en los sectores orientados a la exportación.
Destacaron que el frente interno presenta el balance más adverso, por rubros relacionados con el gasto público, que podría normalizarse a un menor ritmo de lo previsto, así como por la incertidumbre política y económica, que seguirán afectando la confianza y el empleo.