El vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, José Manuel Suazo Reyes, confió en que las persona que salieron elegidas con la mayoría de votos en el pasado proceso electoral respondan con eficiencia, creatividad, responsabilidad y honradez a los ciudadanos.

Apuntó que el periodo de campañas ha quedado atrás, por lo que es momento de que las autoridades entren en una nueva etapa de colaboración, observación y exigencia, pues durante las campañas electorales se pudo constatar las necesidades más apremiantes de la gente.

Ante ello subrayó que: "ojalá esa fotografía no se borre de la mente pues existe una pobreza galopante, urge reactivar la economía; se necesitan muchos servicios básicos como la salud y la educación".

Dijo que es momento de integrar los mejores equipos para enfrentar el servicio público, pues no hay tiempo de improvisaciones o ensayos, ni para echar culpas al pasado, se requiere competencia y no caer en abusos de autoridad.

"El tejido social está lastimado y es necesario reconstruirlo. Toca ahora integrar los mejores equipos para dar el 100% en el servicio público".

Consideró que será muy importante que gobierno y sociedad caminen de la mano para llevar a cabo esta misión, "este es el rasgo de la nueva gobernanza. La etapa de la contienda y las promesas ha terminado, ahora todos debemos involucrarnos en la construcción de una mejor sociedad".

Como comunidad cristiana, expuso, tienen esperanza de que es posible construir el México que se anhela desde el respeto por los derechos humanos, cuidando la identidad y los valores, fortaleciendo las instituciones y protegiendo las libertades.

"Se requiere reactivar la economía, generar inversiones, apostarle a la educación, cuidar el orden y la seguridad y generar mejores condiciones de vida para todos".

Destacó que la pasada jornada electoral se caracterizó por una buena participación, más del 51% de los electores a nivel nacional acudieron a las casillas para elegir a las autoridades y legisladores.

"El pueblo salió a votar y expresó su voluntad mediante el sufragio. A pesar de la violencia electoral, la persecución política y algunos vicios muy arraigados en los días cercanos a las elecciones, se vivió una jornada electoral participada. Se va disminuyendo el abstencionismo", reconoció.