Al menos ocho trabajadores sindicalizados del área de Recursos Humanos de la Jurisdicción Sanitaria VII de Orizaba se encuentran aislados debido a un brote de COVID-19, que se registró desde la semana pasada donde la titular fue contagiada e infectó a sus compañeros.

Debido a esto, la autoridad sanitaria se obligó a cerrar todo ese espacio y mandar al personal que ahí laboraba a sus casas de manera preventiva, ese problema generó que las notificaciones al personal sindicalizado para que retorne a su lugar de adscripción se hayan detenido.

Fue este lunes cuando conocieron que esta medida se tomó luego de que siete personas que laboran en Recursos Humanos presentarán síntomas de COVID-19 y al practicarlas la prueba dieran un resultado positivo.

Se supo que de las ocho personas entre ellas la titular, dos tienen síntomas fuertes, por lo que aunque están en sus casas se encuentran bajo observación directa. El resto presenta síntomas leves o moderados hasta ahora.

Aunque desde este lunes las áreas en la Jurisdicción Sanitaria número 7 se mantienen con guardias, pero la oficina de Recursos Humanos está totalmente cerrada.