Durante plena contingencia sanitaria, la diputada local, Montserrat Ortega Ruíz, continúa exhortando y solicitando al Gobierno del Estado atienda las necesidades y afectaciones que la pandemia ha ocasionado en la entidad, por lo que envió un oficio al ejecutivo, Cuitláhuac García Jiménez, solicitando la condonación de recibos de agua y el apoyo mensual a personas que han perdido su empleo.

En el oficio entregado y recibido hace unos días, se resalta los retos que enfrentan los trabajadores del sector salud y la situación de toda las personas que se están quedando sin empleo, los pequeños comerciantes que han tenido que cerrar sus negocios; por lo que volvió a solicitar que cese el cobro del agua y se condonen los impuestos estatales.

“Respetando la esfera de competencias, como representantes del pueblo veracruzano, igualmente, le convengo a considerar un exhorto a la federación para que cesen los cobros de energía eléctrica, que en vez de que exista una disminución en sus tarifas están en aumento, afectando severamente la economía de las familias”.

Montse Ortega asegura que, de considerar estas propuestas, se podrán reducir los efectos de la pandemia que se enfrenta, protegiendo la salud y la economía de las y los veracruzanos.

Entre los puntos a resaltar dentro de la solicitud de la diputada está:

• Que el dinero de los fideicomisos estatales que se extinguieron, se sumen a la partida presupuestal de la Secretaría de Salud que ascienden a 4260 millones de pesos para este año, posibilitando que todo el personal del sector salud pueda recibir un doble salario y un bono especial, incluyendo personal médico, de enfermería, paramédicos, custodios y personal de seguridad.
• Bajo los principios de transparencia y honradez, aludidos en el Decreto referido, se debe transparentar el uso de esos recursos, y se adquiera el equipo de protección médica.
• Que se ordene el cese de los cobros del agua y se condonen los impuestos estatales, como ha ocurrido en muchos otros países.
• Y considerar la propuesta del PAN, de generar un ingreso universal de 3,200 pesos para todas las personas que se queden sin trabajo y, además, se generen incentivos económicos que atiendan las necesidades mínimas de la gente.