Los integrantes del Consejo Regional del Café se manifestaron en la plaza Lerdo debido a los bajos precios del café luego de cinco años de afectación por la roya.

Lerdo Fernando Celis Callejas, integrante del Consejo, señaló que esperaban iniciar el año con un aumento en los precios del aromático, pero resultó lo contrario.

Dio a conocer que los productores necesitan que se les pague cuando menos entre 10 y 12 pesos el kilo de café cereza y a 2 mil 750 el quintal de pergamino, pues recordó que el año pasado se pagó a 6 pesos el kilo de cereza y mil 750 el quintal de pergamino.

Resaltó que este año se mejoró la producción y esperaban precios más altos, pero desafortunadamente las grandes empresas transnacionales utilizan de referencia la bolsa de Estados Unidos y esa es manejada por los especuladores, en algunos lugares el precio del café llegó a 9 pesos el kilo da café cereza y actualmente está a menos de 7 pesos, la empresa AMSA en la zona de Ixhuatlán del Café lo bajó a 5.30 el kilo.

"Se esperaba que este año los precios iban a aumentar, pero lo que hay, es algo que no funciona, que es una imposición de las compañías transnacionales de utilizar la referencia de la bolsa de Nueva York, para definir los precios a pagar de los productores, esa bolsa no funciona. Decían que venía una cosecha mayor de Brasil, los precios bajaron hasta menos de 90 dólares el quintal, y después hubo anuncio que había menos cosechas en Brasil, y empezó a subir el precio".

Celis Callejas indicó que el precio del café en la bolsa está en 119.50 dólares, y debido a los problemas que hay entre Estados Unidos con Irán, se están afectando los mercados financieros y esto lo debe de prever el Gobierno del Estado ya que se puede desplomar más el precio.

Los afectados señalaron que en Veracruz debe de intervenir el gobernador, Cuitláhuac García Jiménez, ya que hay mucho descontento por parte de los productores y persistirá si continúan bajando los precios del aromático.

Finalmente, exclamaron que también es necesario que intervenga el Gobierno federal ya que los principales funcionarios de la SADER, están más cerca de los intereses de las grandes empresas que a los productores de café, por lo que deben de revisar el esquema de comercialización actual del aromático y llegar a unos acuerdos pues no ven la mínima voluntad de cambiar la situación.