Indígenas de Chicontepec se enfrentan a la “otra” colonización, la de la educación bilingüe que ya no les quieren impartir en las escuelas públicas estatales y por eso se han opuesto a que la primaria que funciona en su localidad continúe ofreciendo clases hasta que las autoridades educativas no ofrezcan las alternativas que ellos han propuesto y es que sea federalizada; además quieren que los profesores sean cambiados.

Su lengua es el náhuatl, sus costumbres y su cultura indígena poco a poco se extingue. La preocupación es que las nuevas generaciones, como ha sucedido en los últimos tiempos, poco a poco olvide sus raíces y al llegar al nivel superior hasta se avergüencen.

Por eso, desde inicios de 2019 y entusiasmados por los discursos presidenciales de darle prioridad a los pueblos originarios, solicitaron a las autoridades de la Secretaría de educación de Veracruz la gestión para que se otorgara a la primaria de su comunidad una clave federalizada. El fin es que consiguieran que fuera bilingüe, que ofreciera clases en español y náhuatl y que el nombre de la escuela, que actualmente se llama Enrique C. Rébsamen

En febrero, los padres de familia cerraron la escuela, la tomaron, ante lo que consideraron es el desinterés de los profesores designados en esa zona, pues por la lejanía hay ausentismo o retraso para la llegada “hasta del intendente” y se quejan ya que, al no fomentar el respeto a su cultura y su cosmovisión, propicia este velado rechazo a prestar un servicio de calidad.

“No es por capricho, esta lucha es por los niños”, comentó el señor Irineo, uno de los manifestantes y agregó que es un derecho de sus hijos porque quieren una educación buena para ellos.

Al seguir sin respuestas, los paterfamilias optaron por la presión y en varias ocasiones organizaron manifestaciones afuera de la SEV en Xalapa, hasta que los pasados jueves y viernes bloquearon el tramo Xalapa-Veracruz, en demanda de atender su petición, porque si bien tenían una cita con el Secretario Zenyazen Escobar, al final no acudió a la reunión, lo que causó su indignación y su protesta.

El viernes, al no poder resolver la situación y como los padres no cedieron a desalojar la calle, la respuesta fue el desalojo policiaco en el que hubo cuatro detenciones.

Ahora, desde las altas montañas del norte de Veracruz, otro grupo de padres de familia piden a través de videos que comenzaron a circular desde ayer domingo, que la escuela sea reabierta y aunque no les den clases en náhuatl (porque esa se les puede enseñar en la casa, comentaron) lo que quieren es que hoy que inicia el ciclo escolar, sus hijos puedan acudir a la primaria.