El maestro César Augusto Leal Chapa pidió una tregua en lo que calificó como un linchamiento cibernético tras hacerse viral por el trato que dio a un alumno con síndrome de Asperger y luego que la Comisión de Honor y Justicia determinó su retiro como docente y fue asignado al área de investigación en la misma Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (FIME) de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL).

Leal Chapa expresó que sus críticos también “tienen la libertad de celebrar mi destitución o como dice el dicho, hacer leña, del árbol caído”. “Ahora bien, los invito a una tregua y dejar el linchamiento cibernético, puesto que ya se consumó lo que tanto pedían”, apuntó.

A través de un mensaje en su perfil de Facebook, el profesor Leal Chapa comunicó que el miércoles se le dejó fuera de la docencia que ejerció por más de 40 años, luego que se viralizó el video de una de sus clases virtuales, en la que se dirigió a Jesús, uno de sus alumnos que padece el síndrome de Asperger, llamándole “pinche burro”.

“Este güey va a necesitar que le extirpen el cerebro”, también se escucha decir.

“El día de hoy se llevó a cabo la resolución acerca del incidente en el que fui involucrado, por parte de la Comisión de Honor y justicia de la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica de la Universidad Autónoma de Nuevo León, cuyo veredicto fue la terminación de mis funciones para ejercer como docente, por la cual me es triste informar el fin de mi trayectoria de más de 40 años”, declaró.

Agregó que cualquier persona que le genere interés, “está disponible el legado de mi autoría –dentro de la institución educativa-, el Manual de Fundamentos de Diseño Digital para las futuras generaciones de ingenieros”.

"Se ha cerrado un ciclo, pero como dice el dicho, cuando se cierra una puerta, se abre una ventana e inicia un nuevo proyecto. Enfocarme en la investigación en electrónica, una oportunidad que se me brindará y obtendré todo el provecho posible", refirió.

Tras sus declaraciones, al maestro se le acusa de pretender hacerse la víctima sin asumir sus faltas y consideraron una vergüenza que la Facultad de Ingeniería Mecánica y Eléctrica lo recompensara asignándole el trabajo de investigador, en lugar de imponerle una “sanción ejemplar”, pues señalaron que el alumno Jesús, no fue el primero que sufrió sus humillaciones.