El director general de la Clínica-Hospital Arellano, Adrián Arellano, reconoció que la situación económica ha generado que cientos de familias acudan a consultorios de baja calidad y pongan en riesgo su salud, pues muchos de estos negocios que se encuentran adjuntos a una farmacia, sólo se dedican a vender los medicamentos bajo consiga y no ven por la salud del paciente.

El facultativo lamentó que las personas “cierren sus ojos” a la realidad con tal de procurarse la atención médica que necesitan y acudan a una consulta médica de baja calidad.

“Y porque digo que es baja calidad, porque el médico recibe la consigna de: doctor hoy tiene que recetar este producto y este otro producto, entonces están al servicio de la venta de medicamentos y no en la recuperación de la salud del paciente y porqué sabemos esto, porque lo deducimos ya que dentro de la Norma Oficial no está permitida la presencia de un consultorio a menos de 25 metros de distancia de dónde se encuentra una farmacia y si está cerca de ese local, entonces tiene interés de venderle a la farmacia y no para el servicio de la salud del paciente”.

Indicó que por fortuna, la calidad del Hospital Arellano al igual que los servicios médicos particulares de calidad, conservan esta calidad y por lo tanto no se considera que vayan a la quiebra por la presencia de este tipo de médicos de poca ética.

Aunque reconoció que pudiera existir alguna disminución en todo el gremio particular, pero en lo referente al servicio que prestan no se ha notado alguna disminución porque hay suficiente trabajo.