Personal del Hospital Integral de Tlaquilpa lamentó la actitud de víctima tomada por la auxiliar administrativa Guadalupe Ramos Bravo quien denunció acoso laboral, cuando ella tiene un gran historial negativo y sobretodo en agravio de sus compañeros, pues cuando fungió como Administradora cobró cheques de al menos 15 empleados y que jamás pagó a sus subordinados.

Según la empleada, denuncia que la doctora Beatriz Juárez Martínez directora del Hospital de Tlaquilpa, así como Eugenio Colombo López administrador y Claudia Fabiola González Rubio coordinadora de Recursos Humanos están violentando sus derechos como trabajadora.

Ante ello, un grupo de trabajadores de este nosocomio quisieron desenmascarar a esta persona que ahora se queja de supuestos abusos, cuando es sabido que tiene un expediente en contra y hasta un acta administrativa por haber cometido varias irregularidades.

Dijeron que ahora quiere sorprender a la sociedad que ella es una buena persona y que todo están en su contra y pretende crear una imagen que no la tiene, por ello, recordaron que en 2016 se le sometió a una investigación desde oficinas centrales de la Secretaría de Salud, desde la Subdirección de Recursos por haber cobrado cheques afectando el patrimonio de sus subalternos.

Y es que las enfermeras denunciaron que habían trabajado sus semanas y las quincenas nunca se las pagaron, por lo que pidieron que se investigara qué pasó en las oficinas centrales con el pago y expusieron que Guadalupe Ramos Bravo argumentaba siempre de no haber recibido el recurso y mostraba oficios dirigidos a la Subdirección de Recursos, supuestamente, según ella, exigiendo dichos pagos.

Los trabajadores recordaron que en junio de 2016, se solicitó al gerente de la sucursal 343 HSBC de Orizaba, Jaime Téllez Zárate la relación de cheques cobrados por Guadalupe Ramos Bravo pues todos esos pagos fueron en agravio del patrimonio de Rosa López Romero, Alejandra Morales Martínez y Liliana Sánchez Romero.

“Los cheques fueron 0000990 por la cantidad de 3 mil 482 pesos; el cheque 0000 991 por la cantidad de 3 mil 425 pesos y el 0000 992 por la cantidad de 3 mil 500 pesos”.

Fue por ello que se le levantó un acta administrativa instrumentada en contra de Guadalupe Ramos Bravo, trabajadora homologada perteneciente a la Subsección 53 de la Sección 26 del SNTSA con funciones de recepcionista del hospital de la comunidad de Tlaquilpa.

“Ella cobró los cheques no sólo de esas tres trabajadoras, están los expedientes de más de 15 compañeras a los que perjudicó en su patrimonio, pero ahora, ella se hace la víctima. No queremos más corrupción. Si ella, solicita que el secretario Roberto Ramos Alor intervenga, lo avalamos porque serán descubiertas más anomalías y aunque tal vez ya prescribieron, quedará el antecedente de que es un mal que afecta al sistema de salud”.

Apuntaron que la auxiliar administrativa Guadalupe Ramos Bravo se queja de que en octubre solicitó sus vacaciones mediante formato oficial y que estas le fueron negadas, cuando desde hace mucho tiempo, se ha ausentado en innumerables ocasiones y son incapacidades que le han otorgado en el ISSSTE de Orizaba, cuando se sabe que en ese lugar, se pueden comprar esos papeles, situación que también pidieron se investigue.

Manifestaron que tan sólo en el periodo del 18 de noviembre de 2015, 20 de noviembre de 2015, 25 de noviembre de 2015, 27 de noviembre de 2015, 24 de diciembre de 2015 y el 22 de enero de 2016 le autorizaron 3, 1, 4, 28, 28 y 28 días, es decir en tres meses gozó de 90 días de permisos supuestamente por incapacidades.

“Ahora quiere buscar culpables por no otorgarle las vacaciones que supuestamente merece, cuando se sabe que es una persona que le gusta ausentarse mucho, con el pretexto de incapacidad por enfermedad”.

Expusieron que si el secretario de Salud o el Administrador de los Servicios de Salud investigan a fondo la situación, se encontrarán que sólo es protagonismo de una persona que busca seguir con beneficios sin importar culpar a quien sea con tal de verse favorecida.