Carlo Maria Viganò, un exarzobispo que fue embajador del Vaticano en Estados Uindos, dijo al diario estadounidense The Washington Post, en una serie de correos electrónicos, que Francisco y su predecesor, Benedicto XVI, deben aclarar lo que sabían sobre los presuntos abusos cometidos durante décadas por el excardenal Theodore McCarrick.

“En su primera entrevista extensa desde que llamó a Francisco a renunciar el pasado agosto, acusándolo de encubrir a un abusador sexual, Carlo Maria Viganò se comunicó durante dos meses por correo electrónico con The Washington Post”, detalló el diario.

Es “inmensamente triste” que Francisco “mintiera descaradamente a todo el mundo para encubrir sus malas acciones”, en la supuesta protección de McCarrick, y reiteró afirmaciones anteriores de que advirtió al Papa en 2013 sobre el caso: “¿Cómo podría alguien, especialmente un Papa, olvidar esto?”.

Viganò, un conservador católico que ha sacudido al Vaticano durante años con acusaciones de corrupción y abuso en los más altos niveles, desapareció en agosto pasado después de lanzar un mensaje de 11 páginas de ataques contra Francisco y Benedicto XVI sobre McCarrick.

En esa carta, dijo que advirtió a los líderes de la Iglesia en 2006 sobre denuncias que involucraban a McCarrick en casos de conducta sexual inapropiada y abuso con seminaristas varones a lo largo de décadas. Las acusaciones se hicieron públicas en 2018. También escribió sobre “redes homosexuales” profundamente arraigadas en el seno de Roma.

Viganò, quien está respaldado por una facción eclesiástica ultraconservadora de Estados Unidos, pidió que el Papa renunciara por su supuesto silencio. Francisco rechazó las críticas, y negó que estuviera al tanto de las transgresiones cometidas.

El clérigo de 78 años, cuyas acusaciones de corrupción desataron el escándalo de “Vatileaks”, no reveló al Washington Post dónde vive desde que se retiró de la Iglesia, sólo se limitó a declarar que su vida “es bastante normal”.