La Cooperativa Cultural Como suena la Clave a cargo de Loenardo Ortiz Chacón en coordinación con el Centro de Estudios de Cultura y la Comunidad de la UV, invitan a la presentación del disco.
“Réquiem para Arturo” con composiciones de Jorge Frantos.
La cita es en Juárez 126 esquina Betancourt en el Centro de Xalapa a las 18 horas de este viernes 4 de julio.
Jorge Frantos, conocido como “Tiburón salsero”, ha demostrado ser una fuerza creativa de particular importancia en los últimos años desde su papel como compositor con canciones y sones que resumen de muchas maneras la identidad del puerto de Veracruz.
Esa identidad porteña conecta con el Caribe con una producción creativa que nos lleva de la mano por boleros, sones, guajiras e incluso merengues que reflejan la realidad de este pedacito de patria que sabe reír y cantar tan bien.
Debemos enfatizar junto a sus grandes capacidades como compositor su labor como aglutinador, como organizador que ha creado dos de las producciones discográficas más relevantes de los años recientes desde el puerto de Veracruz, a la que se añade ahora esta tercera entrega dedicada a Arturo Pitalúa el director musical de los dos primeros discos compactos.
Esta trilogía llamada apropiadamente “Qué no muera el hijo”, a partir del trabajo como compositor de Jorge Francos, se puede leer como un “quien es quien” de la escena afroantillana desde el puerto de Veracruz.
En este disco, el disco más reciente, encontramos además una trascendental colaboración con Cuba, nuestra mancuerna primordial en el desarrollo de esta música para nosotros. Colaboración tanto por la dirección musical de Sergio Lago, tresero cubano avecindado por muchos años en el puerto, como arreglista de las grabaciones en Veracruz como por la presencia de cantantes y ejecutantes cubanos en algunas de las grabaciones. Resalta la colaboración como director musical, pianista e ingeniero de grabación de Ángel Rubén Cuellar “Solín”.
Este disco es entonces una muestra real de hermandad entre nuestras dos naciones a través de lo que ha sido un eslabón fundamental entre nuestros pueblos: la música.