A pocos días de concluirse la administración de Tomás Ríos, sigue sin terminarse la remodelación de las principales calles del centro de esta ciudad, lo cual ha generado molestia entre los transeúntes al no poder caminar bien por las vialidades.

Algunos ciudadanos han expresado su inconformidad pues las obras, indican, van lentas, aunque las autoridades locales aseguren que se concluirá en tiempo y forma.

En un breve sondeo hecho en el centro histórico, algunas personas expresaron:

"No tenía sentido romper las banquetas y menos en esta temporada", "es obra para darnos atole con el dedo y justificar inversiones millonarias", "mire usted, el alcalde no tuvo juicio en hacer esto y no hacerlo rápido, ya va concluir su administración y la obra no se termina", fueron algunas expresiones de los ciudadanos quienes prefirieron omitir sus nombres.

Otras más como la señora Guadalupe Cabrera, de Canadá, quien vino a visitar a su familia, dijo, "la obra está a destiempo, muy aglomerada, la gente se expone por no caer en los hoyos, se exponen a ser arrollados, eso lo vi yo. Además, no se ve bien la ciudad en esta época".

Por su parte, la joven Maribel González opinó, "es una grave situación a la cual se expone a los ciudadanos, pues se pueden caer y quién se haría responsable, además como ya está por entrar la nueva administración nadie se hace responsable, yo tropecé, y en estas fechas es un caos transitar por el lugar, es un peligro".

Al mismo tiempo, Cesar Galicia comentó, "es una obra innecesaria, fuera de tiempo, con la finalidad de poder 'según' demostrar que la instalación de parquímetros en la ciudad ayudó a su embellecimiento".

"Aunque la zona comercial continúa siendo la más afectada, y las obras no causan el detonante que esperan para el turismo", comentó un ciudadano.