El Panteón Galeana se encuentra abandonado y deteriorado debido al olvido por parte de las familias de los difuntos, quienes dejan de visitarlos por años, inclusive hay lápidas desde 1880, demostrando la antigüedad de ese sitio.

Ya sea por su extensión o por su legado histórico, con fosas en decadencia, criptas grafiteadas a punto de colapsar y basura acumulada entre los sepulcros, es como se puede observar este cementerio que fue el primero en la ciudad y puerto de Tuxpan.

La única fecha en la que se nota la presencia de las familias es en el Día de Muertos, por ello las autoridades han recomendado visitar al menos una vez por semana a sus difuntos, ya que el campo santo está en constante movimiento y las hojas caen y requiere de limpieza.

Los familiares aceptaron que el abandono de los mausoleos es favorecido por su ausencia; un sondeo realizado por los pocos visitantes durante está fechas a este lugar arrojó que ocho de cada 10 personas acuden sólo una vez al año a revisar la morada de sus difuntos.

No obstante, también son muchas las necesidades, como pavimentación de andadores, reparación de las bardas perimetrales, pintura, iluminación, entre otras acciones.

Sin contar que la mayor parte de las tumbas y bóvedas se encuentran repletas de basura, la cual sirve como refugio para la fauna nociva, como culebras.

Asimismo, de acuerdo a lo mencionado por trabajadores del lugar, ya se ha llegado al límite en cuanto al uso de fosas para la inhumación de cuerpos, por lo que dentro de poco tiempo este panteón antiguo no podrá prestar este importante servicio.

Por ese motivo y también por cuestiones económicas, la incineración ha cobrado auge en la zona durante los últimos años.

Sin embargo, la mayoría de la población prefiere seguir enterrando a sus muertos, pero cada vez hay menos fosas disponibles en los camposantos.