La Fórmula 1 informó el jueves que ya no correrá en Rusia, después de que rescindiera su contrato con el promotor del gran premio de ese país en respuesta a la invasión a Ucrania.

El evento, que iba a trasladarse a una nueva pista en las afueras de San Petersburgo el próximo año desde su actual sede en el parque olímpico de Sochi, tenía contrato hasta 2025. La F1 había anunciado la semana pasada la cancelación de la carrera de 2022, originalmente prevista para el 25 de septiembre.

"La Fórmula Uno puede confirmar que ha terminado su contrato con el promotor del Gran Premio de Rusia, lo que significa que Rusia no tendrá una carrera en el futuro", dijo un comunicado del titular de los derechos comerciales del deporte, que decide el calendario.

La decisión de la F1 de retirarse de Rusia se produce después de que el organismo rector del deporte, la FIA, condenara el martes la invasión de Ucrania por parte de ese país, pero dijera que los pilotos rusos y bielorrusos podrían seguir participando en sus competiciones en calidad de neutrales.

La federación británica Motorsport UK prohibió el miércoles a los titulares de licencias rusas y bielorrusas correr en el país, independientemente de la bandera con la que compitan. Nikita Mazepin es el único ruso en la parrilla de la F1.

El piloto de 22 años se enfrenta a un futuro incierto después de que su equipo Haas, de propiedad estadounidense, retirara de su coche toda la marca relacionada con el productor ruso de potasa y patrocinador principal, Uralkali, el último día de los test de Barcelona de la semana pasada.

Uralkali es propiedad del padre de Mazepin, el oligarca Dmitry Mazepin, y el destino de la asociación y la continuidad del ruso en el equipo se decidirá esta semana.

El Gran Premio de Rusia se incorporó al calendario en 2014.

La semana pasada, Rusia lanzó una invasión total de Ucrania, en la que Bielorrusia se utilizó como zona clave. El país califica sus acciones de "operación especial".