Familiares del paramédico asesinado en la unidad habitacional Palmira exigieron al Gobierno del Estado justicia para el joven que fue atacado a balazos por desconocidos.

Los padres de Rafael, la señora Ana María Hernández Rodríguez y Rafael Bermúdez Guzmán, dijeron que su hijo era un joven trabajador y sin vicios, porque no fumaba, no tomaba, y se dedicaba a trabajar como bombero y ayudando a su hermano con un servicio de traslados particulares que hacían con dos ambulancias.

"Rafael Hernández Bermúdez mi hijo era buen chico, trabajador, sin vicios, no fumaba, no tomaba, trabajó en Protección Civil de Ixtaczoquitlan y trabajaba tambien en Bomberos de Orizaba, además ayudaba a su hermano con los traslados", expresó la mamá del infortunado.

Dijo no estar tranquila y que no entiende, y no le parece justo que pase eso, el paramédico jamás recibió alguna amenaza, y es por eso que mantiene la exigencia de justicia.

"Yo exijo a las autoridades estatales, federales también, que nos ayuden a esclarecer esto, estoy muy dolida, yo pido que el gobernador haga algo para que se esclarezca esto".

Cabe decir que Rafael Bermúdez entró a las 15 años a la Cruz Roja de Camerino Z.Mendoza, posteriomente ingresó a bomberos de Orizaba, trabajo que le gustaba mucho, su padre también se suma a las exigencias de justicia.

"Mi hijo jamas hizo una mala acción, era muy trabajador, les pido a ustedes que difundan esto que llegue a los mas altos niveles para que se haga justicia".